20 de octubre

Este año conmemoramos el 65 aniversario de la revolución de octubre de 1944. El 20 octubre de ese año se abrió un proceso de revolución democrática que, durante diez años, transformó Guatemala, abriendo a la amplia mayoría del pueblo la posibilidad de tener derechos básicos de expresión, organización, seguridad social, garantías laborales y libertades generales.

Estas amplias libertades permitieron la conformación de un movimiento campesino, obrero y popular que por primera vez hizo escuchar su voz y exigió sus derechos. Durante el segundo gobierno de la revolución, del presidente Arbenz, el movimiento popular cobró aún más fuerza, impulsado por la reforma agraria que expropió las tierras ociosas de la oligarquía y de la compañía bananera estadounidense.

El temor que este pujante movimiento campesino, obrero y popular infundió en las clases poderosas y en la nueva burguesía surgida al amparo de la revolución, hizo que se fraguara una campaña contrarrevolucionaria dentro del país contra el gobierno de Arbenz. En el plano internacional la United Fruit Company, al ver expropiadas sus tierras, orquestó junto con la Agencia Central de Inteligencia y el gobierno de los Estados Unidos una conspiración, que aliada a la conspiración interna, terminó derrocando al gobierno revolucionario de Arbenz en junio de 1954. La lección que debemos extraer de estos acontecimientos es que los obreros, campesinos y explotados deben a toda costa mantener su independencia de clase no confiar ni en los políticos y partidos burgueses ni en las instituciones del Estado burgués, como el ejército que traicionó a Arbenz, sino confiar sólo en sus propias fuerzas y organizaciones de clase.

En la actualidad el gobierno de Álvaro Colom y la UNE, se cubre de una demagogia socialdemócrata, desarrollando programas asistenciales que regalan dinero, víveres, fertilizantes, aprovechando para hacer clientelismo político. El propósito de estos planes es neutralizar el descontento de los oprimidos y abortar posibles luchas, mientras con la otra mano reprime, criminaliza a las organizaciones y  líderes populares y apoya a los empresarios capitalistas que explotan al trabajador, arrebatan la tierra al campesino y destruyen el medio ambiente de los territorios de las comunidades indígenas.

Hace una semana los compañeros campesinos e indígenas sacudieron al gobierno tramposo y mentiroso de Colom, que no ha cumplido los compromisos asumidos en julio pasado con las comunidades, demostrando el fracaso de las maniobras asistencialistas, pues aquéllos a quienes deberían beneficiar, son quienes se están enfrentando al régimen socialdemócrata.

Asesinatos y encarcelamiento de dirigentes populares, reapertura de bases militares, apoyo a las empresas de minería, impulso de los monocultivos para producir agrocombustibles, actitud cobarde ante las poderosas corporaciones de la burguesía y ante el imperialismo, esto es lo que hace el gobierno de Colom. Por eso llamamos a las organizaciones sindicales, campesinas, estudiantiles y populares a enfrentar y golpear como un solo puño de hierro al gobierno burgués pro-imperialista de la UNE, por la reforma agraria, contra la minería destructora del medio ambiente, contra el desempleo y la carestía de la vida.

PARTIDO SOCIALISTA CENTROAMERICANO. Octubre 2009

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