Por Antonio Bardales.

Este martes 27 de mayo se produjo un evento muy importante en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH). Ante el caos administrativo que impera en el Alma Mater, los estudiantes de la Asociación de Estudiantes de Trabajo Social realizaron una asamblea democrática en la que decidieron tomar del edificio de Ciencias Sociales.

Decisiones inconsultas

Básicamente la indignación de los compañeros se da en el marco de la decisión inconsulta de las autoridades que ha despojado los edificios y estructuras históricas las carreras de Ciencias Sociales, para brindarle el espacio físico a Ciencias Jurídicas.

Esta protesta se produce por un hecho puntual, pero en realidad es solo la punta del Iceberg de un sinnúmero de contrariedades a las que nos enfrentamos los estudiantes que tenemos el privilegio de cursar estudios superiores en la UNAH. El problema no radica en que se les de espacio a otras carreras los edificios que pertenecían a Ciencias Sociales, sino que los estudiantes de la UNAH tenemos un sinnúmero de necesidades estructurales, logísticas y materiales que no son satisfechas por Rectoría, argumentando la falta de presupuesto.

La problemática de las carencias es grande. Fácilmente podemos mencionar: la falta de aulas para impartir clases, cursos sobrepoblados, el atraso o la no apertura de asignaturas, inseguridad en el trasporte, mercantilismo en la venta de servicios a los estudiantes, la no inclusión de los estudiantes en la toma de decisiones, la intimidación hacia los estudiantes que ejercen su derecho a la protesta, solo para mencionar algunas de las más importantes. En este marco, la administración, por orientación de Rectoría se alza como figura autoritaria y omnipresente que no necesita de representatividad, simple y sencillamente impone sus criterios sin consultar a nadie, ejerciendo el más claro despotismo.

¿Nuevos edificios para quienes?

Así es que mientras los estudiantes, razón de la existencia de la UNAH, no tienen aulas donde se les imparta clases, se está construyendo un nuevo edificio para exaltar la gestión de Rectoría. Aclaramos que ningún estudiante se opone a los proyectos de infraestructura que mejoren las condiciones de la UNAH, solo que en este momento las prioridades deben estar orientadas a solventar el gran déficit estructural que tienen las unidades académicas, y que no permite brindarle espacio físico para impartir ciencia.

Una lucha por más presupuesto para la UNAH

Por esto es importante recalcar la importancia de la pequeña lucha de los estudiantes de Ciencias Sociales. No debemos permitir que Rectoría nos eche a pelear a los estudiantes de Ciencias Sociales contra los estudiantes de Ciencias Jurídicas, que seguramente también reclaman espacio para recibir sus clases.

La actual lucha de los compañeros de Trabajo Social debe ser el inicio de un proceso de movilización que arranque conquistas para todos los y las estudiantes que cursamos estudios en la UNAH. Hasta la fecha la Asociación de Estudiantes de Sociología se ha sumado y apoyado en la protesta de los compañeros de Trabajo Social.

Asimismo, la Asociación de Estudiantes de Historia se prepara para acuerpar la lucha que no solo es de los compañeros de Trabajo Social, sino de todos y todas. Es imperativo realizar asambleas informativas en toda la facultad de Ciencias Sociales, haciendo un llamado a todas sus asociaciones a sumarse a la protesta que hasta el momento llevan a cabo compañeros de Trabajo Social y Sociología. Desde Ciencias Sociales debemos llamar al resto de las asociaciones de la UNAH para que apoyen activamente esta reivindicación que es de todos. Solo la unidad asegura un triunfo de todos y todas las estudiantes.

Es importante crear un Comité de Huelga representativo en el que estén integradas todas las organizaciones, Asociaciones y personas independientes que apoyen la protesta que hasta el momento dirigen los compañeros de Sociología y Trabajo social.

Como tareas debemos asumir la creación de comisiones que se den a la tarea de recoger un programa amplio que reivindique las necesidades primordiales de los y las estudiantes, tales como comedor público, transporte seguro y gratuito, aulas para las unidades académicas, entre otras. Esta reivindicaciones son parte de la lucha global para que el Congreso Nacional vote más presupuesto para la UNAH.

Asimismo, las asambleas deben elegir comisiones que se den a la tarea de pasar aula por aula, explicando la razón de la protesta e invitando a las otras asociaciones y estudiantes en general a que se sumen y luchemos unidos en contra de las arbitrariedades del poder que nos pretende avasallar.