Por Horacio Villegas

En las distintas crisis internas que ha vivido la universidad nacional autónoma de Honduras, ya sea en los momentos en que la rectoría ovacionó la aplicación de la normativa académica, dando como resultado las históricas tomas generales del alma mater, los sectores ―aparte de los estudiantes― que vivieron con mayor intensidad las arremetidas, fueron los trabajadores.

Las amenazas de detener los pagos a los profesores por hora era una constante en cada acción de protesta que se realizaba en la universidad en tiempos de Julieta Castellanos y el actual rector Francisco Herrera. La participación de estos profesores en acciones de protesta junto a los estudiantes, era la excusa perfecta de las autoridades para cancelar sus contratos. Hubo varios casos de profesores despedidos injustificadamente en el transcurso de la lucha del movimiento estudiantil.

El empleo por hora

La precarización laboral ha sido un tema constante en las políticas de los gobiernos nacionalistas luego del golpe de estado en el 2009. Justamente en el gobierno de Porfirio Lobo Sosa, y bajo la presidencia del Congreso Nacional por parte de Juan Orlando Hernández, se aprobó el decreto 230-2010 que daba por creado el Programa Nacional de Empleo por Hora de forma temporal, que no fue permanente hasta el año 2014 con el decreto 354-2013 que dio vida a la nefasta Ley de Empleo por Hora.

Esta nueva modalidad de contrato tocaba fondo en las distintas condiciones deplorables, que ya de por sí enfrentaban los trabajadores hondureños: en este nuevo contrato se daban por desvanecidas las conquistas laborales como el décimo cuarto mes, prestaciones, vacaciones, derecho a la seguridad social y a la libre sindicalización. Todo este nuevo panorama les agenciaba nuevas atribuciones a los patronos dando inicio a despidos y a cambio de contratos que antes fueran de permanencia al nuevo contrato por hora.

Los resultados de la Ley de Empleo por hora son notorios en esta pandemia del covid-19: miles de trabajadores que laboran en las franquicias de comidas rápidas “suspendidos” por 120 días sin ninguna remuneración, empleados de maquilas despedidos sin ningún derecho, y próximamente miles de despidos del sector público por el nivel de endeudamiento que dejará en los estados burgueses la crisis económica.

La nueva arremetida contra los profesores por hora

El pasado 6 de mayo la UNAH lanzó la Circular 20-2020 que hacía un llamado al despido directo de los profesores que cubren secciones de clases bajo el régimen de contratación por hora, quienes estarían fuera del segundo periodo académico según dicha circular. El segundo lineamiento lo resume: “2. El II-PAC-2020, deberá desarrollarse de manera virtual, (intensivo) del lunes 22 de junio al 29 de agosto 2020 únicamente con docentes a tiempo completos, medio tiempo y profesores por Hora Nombrados (Horarios)…” (Circular 20-2020, UNAH).

El periódico oficial de la UNAH lanzó una nota el 7 de mayo aduciendo que no habrá ningún despido de estos profesores, pero la declaración de Iris Caballero, encargada del personal en el SEDP, confirma que las contrataciones de profesores por hora para el 2do periodo académico, antes de ser un derecho, ahora se convierten, en una cruel “posibilidad”:

“Es un período intensivo, el cual se desarrolla históricamente con el personal permanente, sin embargo, no se descarta la posibilidad de contratar, de ese otro número de maestros que están condición temporal, para servir algunas cátedras que sean necesarias según la demanda de matrícula” (Presencia Universitaria, 7 de mayo 2020).

En resumidas cuentas, son despidos directos, el resultado de contratos que vuelven a los profesores por hora empleados desechables, que no sirven en momentos de crisis a una institución supuestamente a la altura, por ser la máxima casa de estudios del país.

Reactivar la plataforma de profesores por hora

Los profesores por hora no deben pagar las consecuencias de la pandemia, tiene derecho a estabilidad laboral y a un salario digno, sobre todo en este momento de gran crisis social. Ellos ya se habían organizado una plataforma que buscaba visibilizar sus luchar a lo interno de la Universidad. Si estuvo en reposo esta organización, es momento de reactivarla y trazarle objetivos claros que pueden servir de horizonte en esta crisis que apenas inicia. Todo tenemos derecho al trabajo, que el Estado y la UNAH asuman los costos. Exijamos a las autoridades universitarias una verdadera planificación del segundo periodo académico que incluya a todos los profesores por hora sin excusa alguna, y las medidas inmediatas como no subir las notas de este periodo en curso deben ser el inicio de más propuestas que muestren determinación en esta activa plataforma de profesores por hora.