Por Salvador Belloso

Durante los años 80’s la clase obrera salvadoreña logro extender parte de la dirección revolucionaria del movimiento de masas dentro del movimiento sindical, la dura represión de la dictadura militar llevo al aniquilamiento u encarcelamiento selectivo de cuadros y dirigentes de las organizaciones sindicales y populares, luego la incorporación muchos de sus militantes a las filas guerrilleras del FMLN, lo que propicio el debilitamiento de la dirección revolucionaria de las masas.

La ofensiva militar del 10 de enero de 1981 fue una muestra muy palpable de tales acontecimientos, aquel llamado del FMLN a la insurrección no logro calar en las amplias masas y más bien dejo al descubierto el desvanecimiento de la organización obrera y popular. Esto coloco a la orden del día una tarea inmediata que consistía en la reactivación del movimiento de masas. En este contexto fueron Surgiendo instrumentos amplios que permitieron la unidad en general de la organización sindical del país: Comité de Unidad Sindical (CUS), Movimiento Unitario Sindical Y Gremial de El Salvador (MUSYGES), Unidad Nacional de Trabajadores Salvadoreños (UNTS), Movimiento Paz, Pan, Tierra y Libertad (MPTL) y desde luego la continuidad del heroico Federación Nacional Sindical de Trabajadores Salvadoreños (FENASTRAS) el cual desde su fundación en 1972 y pese a la durísima represión no había sido desvanecido.

De la combatividad de FENASTRAS

Surgida en el marco de la agudización de la crisis económica acrecentada a raíz del fracaso del mercado común centroamericano, citar a la histórica FENASTRAS es hablar sobre la principal organización unitaria sindical que a fuerza de lucha organizativa llego a ser referente dentro del proceso revolucionario, desde antes y hasta el final de la guerra civil fue duramente perseguido y reprimido por los gobiernos de la dictadura y contrainsurgencia: Humberto Romero, Álvaro Magaña y Napoleón Duarte.

FENASTRAS a inicios de 1980 seguía siendo pieza importante dentro de la lucha revolucionaria de las masas, llegando a ser la mayor en cuanto a grado de organización y lucha sindical se refiere, sin embargo el que en su seno no haya desarrollado la autonomía de la dirección obrera propendió el factor decisivo que imposibilito el desarrollo de una mayor movilización, porque su acción política devengaba de la dirección del partido Resistencia Nacional (RN), que fue un partido nacionalista pequeño burgués que aspiraba a la realización de amplias reformas en el país, dejando intacto el Estado burgués, la presión de las masas durante la década de los 70’s le hiso girar hacia sectores de vanguardia, lo que abrió el espacio para que se erigiera dentro de la conducción obrera y popular, pero no para dirigir las masas hacia la toma del poder si no para utilizarles como forma de presión hacia el gobierno de la oligarquía.

FENASTRAS no obstante fue también instrumento del que se valían particularmente los trabajadores del sector público para concretizar sus demandas, reivindicaciones económicas y democráticas, la coyuntura del momento colocaba la acción combativa por encima de las pasivas negociaciones con la patronal.

A finales de la década de los 80’s el movimiento sindical y popular estaba en pleno desgaste sin embargo hubieron intentos desde la dirección guerrillera de reactivar la efervescencia revolucionaria de la década anterior, el sindicalismo seguía siendo para estas direcciones un instrumento muy valioso para presionar al gobierno de la oligarquía y al imperialismo yanqui.

La clase obrera sangra

El 31 de octubre de 1989 días antes de la ofensiva final ocurre un hecho sangriento e imborrable como fue el atentado a FENASTRAS, el documento de la Comisión de la Verdad al referirse a la descripción de los hechos señala: “Los atentados. En la madrugada del 31 de octubre de 1989 dos hombres uniformados habrían colocado una bomba en la entrada de COMADRES en San Salvador…La Policía Nacional responsabilizo a la guerrilla del hecho…El mismo día alrededor de las 12:30 p.m., un trabajador afiliado a FENASTRAS observo a un sujeto cuando coloco un saco recostado contra la pared del comedor de FENASTRAS. Sintió olor a pólvora y corrió hacia adentro para avisarle a sus compañeros…Afuera alguien grito “!bomba! y la gente empezó a correr. En ese momento estallo… las oficinas quedaron destruidas. Más de 40 personas resultaron heridas y murieron las siguientes personas: Ricardo Humberto Cestoni, sindicalista, Carmen Catalina Hernández Ramos, cocinera de FENASTRAS, José Daniel López Meléndez, sindicalista; Julia Tatiana Mendoza Aguierre, sindicalista hija de dirigente del Frente Democrático Revolucionario asesinado en 1980, Vicente Salvador Melgar, sindicalista; María Magdalena Rosales, estudiante, …Rosa Hilda Saravia de Elias, cocinera de FENASTRAS, Luis Edgardo Vázquez Márquez…y Febe Elizabeth Velásquez , Secretaria de Relaciones Internacionales de FENASTRAS, miembro del Comité Ejecutivo de la Unidad Nacional de Trabajadores Salvadoreños. Miembros de FENASTRAS Y los sindicatos principales acusaron   a la Fuerza Armada. La UNTS acuso al Ministro de Defensa de haber “ajusticiado” a los trabajadores como represalia a un ataque del FMLN al Estado Mayor el día anterior. (INFORME DE LA COMISION DE LA VERDAD P. 97)

Versión oficialista de los hechos

Ante este hecho sangriento el mismo gobierno opresor ordena una investigación de los atentados. En seguida la Comisión de Investigación de Hechos Delictivos (CIHD), el poder judicial y la Policía Nacional iniciaron sus respectivas investigación el mismo informe señala “…Representantes de la CIHD opinaron ese mismo día que la causa de la explosión se debió a la mala manipulación de material explosivo dentro de la misma casa. Miembros de la sección de Explosivos de la Policía dedujeron que el atentado “…Se encuentra dentro del plan conspirativo que tenía como objeto desprestigiar al GOES haciendo creer a la Comunidad Nacional e Internacional que el atentado era una respuesta del Gobierno por el ataque de artillería que lanzo el FMLN el día 30OCT89, a las instalaciones del EMCFA…lo que viene a concluir que el atentado fue un auto atentado del FMLN para confundir a la opinión publica….” . Todo parece que el gobierno busca sustentar su inocencia, es así como el Sargento Carlos Sosa Santos de la Policía Nacional “…descarta la posibilidad que el explosivo hubiese sido colocado en FENASTRAS por persona desconocida ajena a esa organización ya eue en el interior del sindicato se realizaba una reunión, existiendo la posibilidad de que el acceso al interior estuviera controlado por personal del mismo…” (INFORME DE LA COMISION DE LA VERDAD P. 97). A la fecha dicho masacre no ha sido investigada con la seriedad del caso, pero si dejo marcada a las organizaciones sindicales es por ello que en homenaje a los caídos en esa fecha cada 31 de octubre se conmemora el día del sindicalista salvadoreño.

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