Pérez Molina entrega al presidente del Congreso iniciativa de amnistía fiscal
Por Armando Tezucún
La gestión gubernamental de Otto Pérez Molina y el Partido Patriota hizo para este año proyecciones económicas que pecaron de optimistas, y al final del primer semestre los funcionarios del gobierno se están viendo en serios aprietos para alcanzar sus metas.
Veamos algunos datos. De enero a mayo la Superintendencia de Administración Tributaria esperaba recaudar en concepto de impuestos Q 21,203.8 millones, pero la recaudación sólo alcanzó la cantidad de Q 19,893.3 millones. Esto implica una brecha fiscal de Q 1,310.5 millones (El periódico 19/06/13).
Pero en realidad el faltante en los fondos para cubrir el presupuesto 2013 es mayor, puesto que en el mismo están contemplados dos préstamos que aún no aprueba el Congreso. Estos son un préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo por US$ 237 millones (Q 1,896 millones) y un préstamo por US$ 200 millones (Q 1,600 millones) con el Banco Mundial (Prensa Libre 8/06/13). Un tercer préstamo por US$ 35 millones (Q280 millones) con el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola se perdió porque el Congreso no lo conoció a tiempo (La Hora 27/06/13). Además hubo una sobrestimación de Q 500 millones en el  monto de donaciones que se recibirán. Todo suma un hoyo fiscal de Q 5,586.5. Sin embargo, el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales sitúa la brecha en los ingresos tributarios en Q 2,030 millones y el agujero fiscal en Q 6,100 millones (La Hora 13/06/13).
A mediados de mayo el Ministerio de Finanzas y la Superintendencia de Administración Tributaria acordaron bajar la meta de recaudación 2013 de Q 50,375 millones a Q 49,100 millones, dejando una brecha “oficial” de Q 1,275 millones (Prensa Libre 16/05/13).
En realidad la crisis fiscal del gobierno está íntimamente ligada al estancamiento de la economía nacional y ésta a su vez está vinculada al estancamiento de la economía mundial. Además, la incertidumbre generada por las impugnaciones a la Ley de Actualización Tributaria ha retrasado el pago de impuestos por parte de empresarios y la población en general.
El 35% de la recaudación fiscal proviene de impuestos al comercio, y el comercio exterior está en franco retroceso. En junio el Banco de Guatemala tuvo que revisar a la baja sus expectativas de crecimiento de las exportaciones de entre el 6 y el 11%  a entre 3 y 7%. Con las importaciones al inicio la expectativa era de un crecimiento de entre 7.3 y 12.7%, mientras que ahora espera un crecimiento de entre 5 y 9% (Siglo XXI 20/06/13). Por otro lado, el Banco de Guatemala esperaba un crecimiento del Producto Interno Bruto entre 3.5 y 3.9% para 2013; en julio fijó las expectativas en el porcentaje más bajo, 3.5%.
El 17 de mayo el presidente Pérez Molina anunció que el gobierno tomaría medidas de austeridad para paliar el déficit en la recaudación fiscal. Ordenó que los ministerios limiten los gastos en viajes al exterior, combustible, alimentación, vehículos, maquinaria y equipo de cómputo, además de suspender la contratación de nuevo personal y los bonos a los empleados estatales.
En otra medida para aliviar la falta de fondos, el 12 de junio el gobierno anunció una amnistía fiscal consistente en la condonación del 5% y 10% del pago de impuestos atrasados y exoneración de multas durante tres meses. Además redujo en un 50% el pago del Impuesto Sobre Circulación de Vehículos, el cual había sufrido un gran incremento en la Ley de Actualización Tributaria que entró en vigencia este año. El Congreso aprobó la medida unos días después, aunque analistas consideran que sumando y restando lo recaudado con lo exonerado, el incremento en la recaudación será exiguo (ver La Hora 26/06/13).
Mientras, a inicios de julio fue presentado al Congreso un proyecto para reformar la Ley de Actualización Tributaria, consensuado entre el gobierno y las cámaras empresariales, que dota a los empresarios de una serie de privilegios y exoneraciones. Según el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, “Se pretende legitimar vía nueva legislación un mecanismo de fraude fiscal, es decir, evasión de impuestos en proyectos de vivienda; también quieren exonerar de Impuesto Sobre la Renta a los que compren energía eléctrica a proveedores fuera de Guatemala” (El Periódico 3/07/13).
Llamamos a los compañeros trabajadores, campesinos y pueblo en general a estar alerta para impedir que el gobierno rebaje el poco gasto que realiza en salud, educación, y gasto social en general. Para solucionar el déficit fiscal el gobierno debe eliminar las exoneraciones y privilegios fiscales que otorga a los empresarios nacionales y extranjeros, aumentar los impuestos directos sobre las ganancias de las empresas. La crisis no la debe pagar el pueblo, la deben pagar los capitalistas.

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