Boris Yeltsin, montando en un tanque, arenga a la poblacion contra el golpe de Estado

Historia

Por Nassar Echeverria

Hace 32 años, entre el 19 y 23 de agosto de 1991 se produjo una intentona de golpe de Estado contra Mijail Gorbachov, secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) y presidente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Un acontecimiento ahora olvidado pero que en su momento marcó el colapso de la URSS

La URSS y la crisis del stalinismo

El triunfo de la insurrección bolchevique, en octubre-noviembre de 1917, sentó las bases para la construcción del primer estado obrero en la historia de la Humanidad. No fue un asunto fácil. Los bolcheviques, con Lenin y Trotsky a la cabeza, tuvieron que enfrentar una dura guerra civil y la intervención militar de 14 ejércitos imperialistas.

La política bolchevique de entregar la tierra a los campesinos, de otorgar autonomía a las diversas nacionalidades que conformaban el imperio ruso, y la firme voluntad de triunfar de su clase trabajadora, permitió el triunfo militar y la creación de la URSS.

La revolución en el resto de Europa se estancó y retrocedió. Los bolcheviques se encontraban solos, rodeados de enemigos. Después de la prematura muerte de Lenin en 1924, los bolcheviques discutieron la forma de construir el socialismo. La URSS se conformó con las bases económicas del antiguo imperio zarista, el más atrasado económicamente entre los imperialismos en Europa

La ruina económica provocada por la guerra mundial y la guerra civil, el desgaste de la clase trabajadora, la muerte de Lenin, y el aislamiento de la URSS, aceleraron el proceso de degeneración burocrática del partido bolchevique. Stalin terminó controlando el aparato del partido y del gobierno soviético e inicio una feroz lucha contra la vieja guardia bolchevique representada por Trotsky, Zinoviev, Kamenev y Bujarin, entre otros.

El stalinismo se convirtió en la corriente dominante. Stalin elaboró la teoría de que el socialismo se podía construir en un solo país, es decir, construir una isla socialista en el mar capitalista, e inició una campaña de eliminación física de la llamada oposición de izquierda.

El pronostico de Trotsky sobre la restauración capitalista

Trotsky fue enviado al exilio, y sus seguidores enviados a campos de concentración en Siberia.

La solitaria voz de León Trotsky y de la Oposición de Izquierda se alzaron no solo contra la reaccionaria teoría elaborada por Stalin, que el socialismo se podía construir en un solo país, sino que alertaron que, si la revolución proletaria se estacaba en el mundo, la URSS inevitablemente sufriría un proceso de restauración capitalista.

En su libro La Revolución Traicionada (1933), León Trotsky alertó sobre el peligro de restauración si la URSS continuaba aislada.

Dos tendencias opuestas se desarrollan en el seno del régimen (soviético). Al desarrollar las fuerzas productivas —al contrario del capitalismo estancado—, ha creado los fundamentos económicos del socialismo. Al llevar hasta el extremo —con su complacencia para los dirigentes— las normas burguesas del reparto, prepara una restauración capitalista.

(…) Cuanto más largo sea el tiempo que la URSS permanezca rodeada por un medio

capitalista, más profunda será la degeneración de los tejidos sociales. Un aislamiento indefinido provocaría infaliblemente no el establecimiento de un comunismo nacional, sino la restauración del capitalismo”.

La carnicería de la segunda guerra mundial, que terminó con el aplastamiento de la Alemania nazi, por el enorme esfuerzo de la URSS, alargó la vida de la burocracia stalinista, por algunas décadas, pero no solucionó el problema de fondo que León Trotsky había logrado visualizar y plantear teóricamente: el atraso de las fuerzas productivas de la URSS en relación a las grandes potencias imperialistas, y el agresivo entorno del mercado mundial capitalista e imperialista en el que tenía que navegar la economía de la URSS

La “guerra fría” y la “guerra de las galaxias”

El frágil statu quo de los pactos de Yalta y Postdam, en el que la URSS bajo el stalinismo se convirtió en una potencia mundial con su respectiva área de influencia, se mantuvo por algunas décadas.

Bajo las tensiones de la guerra fría, los conflictos regionales, las guerras de baja intensidad, y finalmente, con el proyecto de Ronald Reagan de montar la “guerra de las galaxias”, los gastos de defensa de la URSS aumentaron considerablemente, provocando un declive en el nivel de vida de las masas soviéticas. La crisis económica en el “campo socialista” se agudizó no solo por la presión militar y económica del imperialismo mundial, sino por las desastrosas políticas de la burocracia stalinista que comenzó un lento pero sistemático camino de pequeñas aperturas hacia el capitalismo

La perestroika y la Glasnot de Gorbachov

Mijail Gorbachov llegó a ser secretario general del PCUS y, por lo tanto, presidente de la URSS, en marzo de 1985, bajo la brutal contraofensiva imperialista que Reagan desarrollaba en todo el mundo. La URRS y Estados Unidos se enfrentaban en guerras regionales en Afganistán, África y Centroamérica.

Gorbachov pertenecía a una nueva camada de dirigentes que sustituían a la gerontocracia stalinista. Al año siguiente, en marzo de 1986, Gorbachov anunció su política de “perestroika” (reestructuración del Estado y la economía soviética). La “Glasnot” (transparencia) fue anunciada en 1988. Esta agresiva política de reformas y de concesión de ciertas libertades creo muchas expectativas dentro de la URRS, y a nivel internacional le hicieron aparecer como un dirigente moderado y conciliador

A nivel internacional, en las llamadas Cumbres, entre Reagan y Gorbachov, la URSS hizo muchas concesiones a Estados Unidos, con el objetivo de aliviar las presiones, pero fueron inútiles. A cada concesión venia una nueva exigencia.

El muro de Berlín, que dividía Alemania en dos países, producto de los acuerdos entre Regan y Gorbachov, se derrumbó en noviembre de 1989. Y como fichas de dominó comenzó a caerse el castillo stalinista.

La Perestroika y la Glasnot lejos de revitalizar la economía y modernizar el Estado, introdujeron elementos de mayor crisis, porque el régimen burocrático stalinista temía profundamente a la población.

El intento de golpe de Estado de agosto de 1991

Las concesiones de Gorbachov provocaron que un ala del PCUS se lanzará a la lucha abierta por el poder. Una de las mayores crisis de la URSS, no era solo la economía, sino el reclamo de libertad de muchas nacionalidades que fueron oprimidas bajo el stalinismo.

Para calmar el descontento, Gorbachov había anunciado que el nuevo Tratado de la Unión, es decir, la nueva URSS en transito hacia el capitalismo, seria firmado el 20 de agosto de 1991. Algunos países bálticos, como Lituania y Letonia, aprovechando el caos que carcomía a la URSS, proclamaron su independencia. Una consulta popular en Georgia también se pronunció por la separación de la URSS

El ala más conservadora de la burocracia stalinista, organizo una conspiración con apoyándose en un sector de la KGB, para destituir a Gorbachov, al que consideran principal culpable de la desmembración de la URSS.

En la mañana del 19 de agosto de 1991, en cadena nacional de radio y televisión, se dio a conocer la creación de Comité de Emergencia, una especie de junta de gobierno provisional, declarando el estado de excepción, y el recorte de las pocas libertades. Se estableció la censura en los medios de comunicación, y tropas tomaron lugares estratégicos en Moscú y ciudades importantes

En el comunicado leído en cadena nacional de radio y televisión se justificaba el golpe de Estado: “Tenemos que tomar medidas decisivas que eviten la deriva del país hacia la catástrofe”.

Guennadi Yanáyev, vicepresidente de la URSS, se proclamó presidente en funciones del país en sustitución de Mijaíl Gorbachov, que, según el Comité de Emergencia, había enfermado gravemente.

Boris Yeltsin aprovechó la coyuntura

Borís Yeltsin, quien era presidente de República Socialista Federativa Soviética de Rusia (RSFSR por sus siglas en ruso) lanzó una proclama oponiéndose el golpe de Estado y convocó a una huelga general, que fue apoyada masiva y espontáneamente por la población, que miraba en el golpe de Estado un retorno a los momentos mas duros vividos bajo la dictadura stalinista.

Pero los golpistas no contaban con la rebelión de sus tropas. Los tanques fueron rodeados por la población, y los soldados confraternizaron con la gente en las calles.

Borís Yeltsin salió a las calles y se trepó en uno de los tanques para arengar al pueblo. Este hecho lo catapultó a nivel nacional e internacional como un decidido líder contra el golpe de Estado.

La población rodeaba a las tropas, les regalaban cigarros, flores, brindaban con ellos. Los golpistas se quedaron sin tropas. Las estructuras del PCUS no apoyaron el levantamiento militar. Las republicas se pronunciaron contra el golpe de Estado.

El 21 de agosto, miembros del Comité de Emergencia volaron a Crimea para entrevistarse con Mijaíl Gorbachov, donde lo mantenían prisionero y nuevamente le pidieron la renuncia. Gorbachov se negó

Después llegó otra delegación, pero de los seguidores de Boris Yeltsin, para hablar con Gorbachov. A esas alturas la revuelta había fracasado, porque las otras ramas de las fuerzas armadas se negaron a apoyar a los golpistas, quienes fueron encarcelados (algunos se suicidaron) hasta febrero de 1994, cuando la recién elegida Duma del Estado (Cámara Baja del Parlamento ruso) decretó una amnistía.

La disolución de la URSS

Los acontecimientos se precipitaron. El 23 de agosto de 1991 durante la sesión plenaria del Soviet Supremo de Rusia y en presencia del presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, Borís Yeltsin firmó el decreto sobre la suspensión de las actividades del Partido Comunista de la Federación de Rusia. El 6 de noviembre, en vísperas de la máxima fiesta comunista (el septuagésimo cuarto aniversario de la revolución bolchevique), Yeltsin prohibió definitivamente el partido.

En el período del 24 de agosto al 16 de diciembre de 1991 se declararon independientes casi todas las repúblicas de la URSS. El día 20 de diciembre la URSS dejó de existir.

El fallido golpe de Estado aceleró la crisis y desintegración de la URSS. Boris Yeltsin, que representaba el ala mas de derecha de la burocracia stalinista, salió con el gran ganado y el que abrió las puertas, de par en par, a la restauración capitalista en los territorios del antiguo impero zarista

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