Dominique-Strauss-Kahn

Por Marco Antonio Moreno

Al mejor estilo de las películas de Román Polansky, Dominique Strauss-Kahn fue detenido en Nueva York y obligado a descender del avión que lo trasladaba a Berlín donde tranquilizaría a Angela Merkel de que el próximo rescate a Grecia tendría un bajo costo para Alemania, y que el euro se mantendría firme y robusto dado que es el dólar el que vive una crisis terminal. Sin embargo, por ser acusado de violar y golpear a una camarera del hotel donde se hospedaba, Strauss-Kahn no pudo llegar a la cita con la Canciller germana y pasó de ocupar una habitación de 3.000 dólares la noche en un hotel de Manhattan, a pernoctar en una fría celda en el corazón de Harlem donde llegan todos los acusados de delitos sexuales.

¿Qué hacía Strauss-Kahn en Nueva York, si la sede del FMI está en Washington? Es una pregunta que hasta el momento nadie se ha interesado en responder, porque se desconocen los planes y las reuniones secretas entre la Reserva Federal de Nueva York y el director del FMI para el reciclaje de la deuda de Estados Unidos, que ayer alcanzó su techo de 14,3 billones de dólares. El tratamiento especial que debería tener esta deuda, de acuerdo al diseño de DSK, obligaba a Estados Unidos a desplegar un alto esfuerzo y desprenderse de su rol hegemónico en el sistema financiero internacional. Dominique Strauss-Kahn fue la primera autoridad de una institución con sede en Washington en plantear que el dólar no cumplía como divisa mundial, y encabezó los intentos por diluir su hegemonía, como lo hizo al plantear la necesidad de una divisa mundial no perteneciente a ningún país y recuperar el rol y el sentido del bancor.

Strauss-Kahn tenía claro que el dólar es el problema que dificulta la recuperación económica mundial, y que es una divisa en vías de la extinción producto del excesivo endeudamiento de la primera economía del planeta. Recordemos que la deuda pública de Estados Unidos comenzó a tener un vertiginoso ascenso en los años 80 (como muestra la gráfica), y que pese a su ralentización en los años 90, aumentó dramáticamente de 5,7 billones de dólares en enero de 2001 a 10,7 billones de dólares a finales de 2008 (casi el doble), y a 14,3 billones de dólares en abril de 2011, cuando la deuda pública alcanzó el 98 por ciento del PIB del país.

Los 3,6 billones de dólares añadidos a la deuda nacional de Estados Unidos desde fines de 2008, es más del doble del valor de mercado de toda la fabricación del sector privado en el año 2009 (1,56 billón dólares), más de tres veces el valor de mercado de los gastos en profesionales, científicos y servicios técnicos de ese año (1,1 billón de dólares), y casi cinco veces el monto gastado en bienes no duraderos (722 mil millones dólares). Sólo los intereses pagados sobre la deuda federal en los primeros seis meses del último ejercicio (octubre 2010-abril 2011), llegan a 245 mil millones dólares, cifra que equivale a más del 40 por ciento del valor total de mercado de todo el gasto del sector privado de la construcción en 2009 (578.000 millones de dólares).

A esta pesadilla de una deuda descontrolada, Estados Unidos agrega la de ser el mayor consumidor de petróleo del mundo, y con el crudo a un valor de 95 dólares el barril, su gasto se eleva a 600.000 millones de dólares anuales que sólo puede sostener cancelando con los dólares que imprime. De ahí la importancia estratégica de los petrodólares, pues si se acaban, la bancarrota para Estados Unidos llegará mucho antes. Parte de estos tópicos los analizamos en El origen del caos financiero y del desempleo global, y Del desorden financiero a la quiebra de Estados Unidos.

Strauss-Kahn trabajó en la desmonetización selectiva del dólar de Estados Unidos y su objetivo buscaba hacer del dólar una moneda para uso interno en Estados Unidos, dejado la nueva moneda de reserva a un tipo de cambio muy favorable para el dolar interno, pero gravando a los tenedores externos de dólares. De esta forma se depreciarían las deudas en dólares, favoreciendo las deudas en dólares de los ciudadanos y las corporaciones estadounidenses. La inflación derivada de esto ayudaría a enmascarar la amortización de la deuda, y el tiempo haría el resto. El costo para Estados Unidos sería el “compartir” la hegemonía monetaria con otras divisas.

Desde diciembre de 2009, Strauss-Kahn hizo públicas sus iniciativas de dinero nuevo. Para abril de 2010 tenía desarrollados los DEG por valor de 100.000 millones de dólares, una propuesta que, sin embargo, era rechazada por los países con superávit como China e India, y los países petroleros. El empeoramiento de los países de la periferia europea a partir de mayo del año pasado, obligó a Strauss-Kahn a abandonar el tema en forma pública hasta la cumbre de Davos de este año.

Se piensa que el plan estaba listo para ser presentado durante este mes, aprovechando el nuevo rescate a Grecia. Pero todo esto ya es parte del pasado. Su detención no sólo hunde la idea de la desdolarización del mundo, sino que también apunta a la desacreditación total del FMI, justo en los momentos en que comenzaba a gozar de amplio reconocimiento en virtud a sus nuevas políticas, como lo ejemplifica este artículo de Joseph Stiglitz: El viraje a tiempo del FMI, o cuando el mismo Strauss-Kahn expresó que “Las políticas liberales de los últimos 30 años merecen una revisión”.

La detención de Strauss-Kahn es muy similar a la que afectó al Gobernador y Fiscal de Nueva York Eliot Spitzer, que cayó en una trampa de prostitución en marzo de 2008, tras procesar a varias empresas de Wall Street que realizaban fraudes en la bolsa de valores, inflaban artificialmente los precios o se coludían en prácticas depredadoras. Y así como la detención de Spitzer no pudo evitar el colapso financiero que se inició a las pocas semanas (con la quiebra de Bearn Stearn), la detención de Strauss-Kahn no podrá evitar la inminente quiebra del actual sistema financiero y de las economías que de él dependen.

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Por Patricio Guzmán S.

Economistas reconocidos como Nouriel Roubini han advertido que la economía mundial podría derrumbarse y que ningún país tiene recursos como para realizar una nueva operación de rescate como la que se llevó adelante en 2008. En el mundo estamos viviendo una espiral inflacionista, sube el petróleo y el gas, el oro, otros minerales y materias primas y los alimentos.

Detrás de estas subidas de precios encontramos la política de ‘quantitative easing’ de la Reserva Federal norteamericana, es decir la producción de trillones de dólares, para llevar a cabo inyecciones de masas monetaria, desde que comenzó la crisis financiera. La Reserva Federal de Estados Unidos, que dirige Ben Bernanke, intenta superar la Gran recesión que dura màs de tres años, con una política de creación masiva de dinero en circulación, que aumenta los precios en todo el globo. El petróleo, comenzó una rápida escalada de precios, incluso antes de las primeras movilizaciones populares en Egipto.[1]

Muchos países subdesarrollados, ahora llamados ‘emergentes,  se han beneficiado de los altos precios de las commodities, por supuesto más sus clases dirigentes en esas regiones caracterizadas por la pésima distribución de los ingresos. Al mismo tiempo, según la FAO (Organización de Agricultura y Alimentación de la ONU), los pobres están siendo fuertemente impactados por el alza de los alimentos. Un par de datos sirven para aquilatar la importancia de la alimentación en el gasto familiar, en China, la compra de alimentos representa cerca del 40% del gasto familia, y en la India cerca del 50%. En los países desarrollados, los hogares gastan solamente un décimo de sus ingresos en alimentos.

De acuerdo con la FAO: “En los últimos 50 años la producción mundial de alimentos ha aumentado de forma vertiginosa, incluso más que la tasa de la población mundial. Entre 1990 y 1997 la producción per cápita de alimentos creció casi un 25 %, sin embargo, en el mundo aún pasan hambre 830 millones de personas, aproximadamente una de cada siete, lo cual representa a una población mayor a la que vive en Europa. El problema del hambre, como fenómeno grave y generalizado, no se debe a la escasez de alimentos, sino a la pobreza de las poblaciones afectadas, quienes carecen de los medios para adquirirlos.”

Un reporte del Banco japonés Namura, indicó una lista de 25 países con los mayores riesgos de inestabilidad como consecuencia de las alzas de alimentos. Entre ellos figuran: Tunez, Egipto, Marruecos, Nigeria, El Libano, India, Pakistan, China, Hong Kong, y Vietnam.

El alto precio del petróleo podría ser la causa inmediata de la próxima crisis, en un contexto en el que aún seguimos sufriendo las consecuencias de la Gran Recesión.

El alza de los precios de los hidrocarburos tiene un efecto en cascada sobre el resto de los precios, se trata de un precio relativamente  inelástico, por lo que la subida se traduce en un efecto inmediato restrictivo sobre la demanda.

El 2 de julio de 2008 el barril de crudo alcanzó su precio más alto con USD $147,

El 2 de enero de 2009 había descendido hasta USD $34. Así que puede decirse, que el mayor estímulo para la economía mundial no provino del rescate masivo del sistema financiero, ni de las gigantescas inyecciones de dinero fresco, sino de la caída sistemática del precio de los hidrocarburos. Ahora puede afirmarse que la era del petróleo barato ha llegado a su término.

En una entrevista al diario español La Vanguardia del 3 de diciembre de 2009, el economista Jeff Rubin señalaba que “Fue el agotamiento del petróleo y no las hipotecas basura la verdadera causa de la crisis. Nos han hecho confundir síntoma con enefermedad, y aunque nadie sepa exactamente cuánto petróleo queda ni cuando se acabará lo que queda claro es que el petróleo barato si se ha acabado y desencadenará una cadena de consecuencias”

La crisis de la deuda, los efectos recesivos de los recortes del gasto social y de los salarios, la ola de movilizaciones y huelgas en Europa, los levantamientos populares en el mundo arabe, y sus efectos más allá, el alza del precio del petróleo, de los alimentos y de otras commodities, anuncian que estamos entrando en una  nueva fase de la crisis económica y social, y que la Gran Recesión no es un fenómeno pasajero, sino que el mundo capitalista entro en una fase recesiva de muchos años.

El alto desempleo, la inflación de alimentos y productos basicos, las presiones del FMI para que se apliquen más recortes de gasto social y se reduzcan aún más los niveles de vida de la gente,  estan en la base de la agitación social que se extiende por el mundo.

El levantamiento popular en Túnez, que provocó la caída de la dictadura, se extendió a Egipto donde puso fin a  la dictadura de Mubarak, y luego a todo el mundo árabe. En estos días se descompone el régimen de Gadafi en Libia. En Arabia Saudita, el gobierno debió ‘comprar’ a la población con grandes transferencias de dinero a los hogares, y de momento consiguió parar las protestas.  Todas las dictaduras de los países árabes, incluida después de la ‘normalización’, el régimen de Gadafi,  mantenían buenas relaciones con los países capitalistas desarrollados. Estados Unidos y la Unión Europea les daba legitimidad, los consideraba regímenes estables, muchos de los dictadores incluso eran miembros de la Internacional de partidos socialdemócratas, de la cual ahora están siendo rápida, pero tardíamente, marginados.

Pero la rebelión popular no se ha limitado a los países árabes, el ejemplo del levantamiento de la población de Tunez  y de Egipto, se extendió al conjunto de los países árabes, y  traspasó sus fronteras, las protestas llegaron hasta Irán, e incluso a China.  Un analista internacional, al ser consultado por las consecuencias de la rebelión en curso en Libia, señaló que tendría consecuencias serias, en primer lugar para Italia, ya que Libia le suministraba el 25% de petróleo y gas, pero que lo que realmente debía  preocupar era la extensión del movimiento a China.

El miércoles pasado tuvo lugar en Grecia la octava huelga general de 24 horas, desde enero de 2010, en  protesta contra las draconianas medidas de austeridad  que el gobierno del PASOK, acordó con las potencias europeas y el FMI, a cambio de los préstamos de emergencia que evitaron a última hora el cese de pagos, en mayo. Las informaciones indican que  fue también una de las huelgas más masivas.  La economía griega se paralizó, el transporte público, puertos, telecomunicaciones y la industria eléctrica se encontraban entre los sectores completamente detenidos. Incluso los propietarios del pequeño comercio se unieron mayoritariamente a las protestas. La manifestación central convocada en Atenas, convocó más de 100.000 personas según la agencia Reuters.

Las medidas de austeridad contra los trabajadores y los servicios de la población que continúa llevando adelante el gobierno griego, han profundizado la crisis económica. El Producto Interno Bruto disminuyó en un 6% en el último trimestre de 2010.

La situación social en Grecia es explosiva, pero no es el único país europeo con amplias protestas de trabajadores y jóvenes.  En Gran Bretaña, en un fenómeno inédito en décadas  los jóvenes entraron en una ola de protestas masivas, ha habido gigantescas manifestaciones y huelgas  en Portugal, España  y Francia. Manifestaciones masivas en Italia...

¿Por qué sube el precio del cobre y de otros commodities?

Las dos principales teorías para explicar las grandes subidas del precio del cobre están basadas en el crecimiento y la inflación, y la combinación de ambas ideas: los bancos Chinos prestaron sumas  enormes de dinero para contrarrestar la recesión de 2008, lo cual impulsó el crecimiento del PIB así como la compra especulativa de commodities, acciones y propiedad inmobiliaria. El gobierno central chino quiere diversificar sus reservas, del dólar, y los recursos naturales son una buena manera de reducir las reservas en dólares.

SimonHunt, president de SimonHuntStrategicServices, dijo ya en Julio de 2009 que los inversionistas embarcaban cobre hacia China con el objetivo de almacenarlo, y esto no aparece en el sistema de reportes. Si este es el caso, los inversionistas deben estar entendiendo equivocadamente las importaciones de cobre por China como demanda industrial en lugar de demanda especulativa.

Entonces, como explicación a la subida de precios hay que añadir un componente especulativo; los capitales de inversión que han encontrado una salida en los mercados de commodities y sus derivados, tras el derrumbe de los nichos de inversión de alta rentabilidad en los países desarrollados, con el estallido de las burbujas. Esto ha provocado sobretodo la subida de precios en los mercados de materias primas, agrícolas de alimentos.

Los Estados Unidos pueden permitirse aumentar la masa monetaria con mayor libertad que cualquier otra economía, por el doble papel del dólar, como moneda interna de la economía norteamericana, y como divisa internacional, lo que significa que una parte de la inflación producto del aumento de dinero, se exporta a otros países.

China ha mantenido su moneda vinculada con el valor del dólar, para mantenerlo ha debido seguir, a los Estados Unidos en la producción de dinero. Pero en la medida que crece la amenaza inflacionaria, que en gran parte es una exportación de Estados Unidos producto de su política de dólar barato, China, India y otros paises han subido sus tasas de interés, y aplicado restricciones al crédito, dando por terminado dos años de expansión del crédito sin parangón. El temor que la India, pero especialmente China, que es la gran economía con más rápido crecimiento, una recesión como resultado de esta política de restricción cuantitativa de la masa monetaria ha alarmado a los especuladores globales. No es una cuestión menor si se considera que el FMI estima que por cada punto de caída en el PIB de China se reduciría el PIB Mundial en casi 0.5 por ciento

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En esta entrevista, el economista argentino analiza la situación socioeconómica actual de la región y sus perspectivas frente a la crisis capitalista global.

Claudio Katz, un destacado profesor de la Universidad de Buenos Aires (UBA) en las áreas de Economía, Filosofía y Sociología es al mismo tiempo un activista de los derechos humanos e investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) de Argentina. Es autor de numerosos textos de interpretación del capitalismo contemporáneo y ha estudiado el impacto regresivo del neoliberalismo en América Latina. Participa activamente en los foros continentales de impugnación del endeudamiento externo. Su libro "El porvenir del socialismo" obtuvo una mención honorífica en el Premio Libertador al Pensamiento Crítico (Venezuela 2005). Igualmente es integrante del colectivo internacional Economistas de Izquierda (EDI) y se desempeña como asesor externo del gobierno venezolano y coordinador del grupo de trabajo Unión Latinoamericana e integración del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).

- Aunque algunos sectores en América Latina ven como positiva la irrupción con fuerza de China en el plano económico y comercial en la región, usted ha señalado que no hay que ser muy optimistas porque el gigante asiático también tiene vocación hegemónica…

- Yo digo que hay que ser cuidadosos con las ingenuidades y con el optimismo a ultranza. Es interesante que América Latina esté diversificando su comercio internacionalmente, ese es un dato importante porque obviamente cuanto mayor es el espectro de países con los cuales comerciamos menos dependientes somos de lo que ocurre en el centro de las naciones más importantes. Pero hay que tener cuidado en esta diversificación con dos problemas: China se está convirtiendo en una potencia económica de peso no en América Latina sino en todo el mundo, como acreedor y como exportador mundial, está adquiriendo ahora incluso porciones de bancos de los países desarrollados y tiene una estrategia muy agresiva en el plano comercial, financiero e industrial, además tiene la prioridad de concertar en este continente y en África buenos negocios de adquisición de materias primas como alimentos, minerales y petróleo a buen precio. Ciertamente, lo que resulta conveniente para el comprador no resulta conveniente siempre para el vendedor, si el perfil comercial de América Latina con China repite el perfil tradicional que tuvimos con Europa en el siglo XIX y con Estados Unidos en el siglo XX, vamos a ser proveedores de materias primas sin elaborar, y al cabo de un periodo nos vamos a quedar con poca minería, con poca agua, con pocos recursos petroleros y alimenticios, y sin ningún grado de desarrollo industrial, entonces, ojo con este problema.

Esta es la principal alerta, porque de lo contrario puede haber una idea equivocada de lo que es China, esto se verifica primero en el tipo de inversiones que tiene esta nación. Cuando viene a países como Perú y Argentina establece términos de inversión que son como mínimo exactamente iguales a los que establece cualquier inversionista extranjero, asegurándose condiciones de rentabilidad, de bajos impuestos, de subsidios, y en segundo lugar, es muy agresivo en exigir condiciones de libre comercio y de garantía de colocación de sus productos manufactureros y esto es mortal para la industria latinoamericana que obviamente no puede competir con un país como China que cuenta con bajísimos salarios.

- ¿Nada halagüeño ese panorama?

- Claro, porque el efecto final de esto es poco empleo, precariedad laboral, mayor desigualdad social, obstáculo en la industrialización. Yo simplemente hago esta advertencia para que estructuremos la política económica en función de las prioridades y las necesidades de nuestros pueblos en la región.

- Cambiemos de tercio. Hace un año en una conferencia que dictó en Quito señaló que había que tener prevención con la también vocación hegemónica de Brasil en América Latina. Hasta el momento no se ha podido poner en marcha el Banco del Sur por las trabas que viene poniendo el gobierno de Planalto. ¿Cómo analiza esta situación?

- A otro nivel para establecer claramente diferencias con China, Brasil es de los países intermedios, medianos, que están ascendiendo pero no tiene ni una historia, ni una capacidad de dominación ni de influencia como la que tiene la nación asiática o como la que tienen Rusia o la India. Pero la vocación hegemónica de Brasil creo que se está verificando y un dato que sigue siendo clave es la participación y asociación con Estados Unidos en la ocupación de Haití, lo cual es un hecho muy revelador. Estados Unidos prácticamente invadió a Haití con el terremoto y las tropas brasileñas quedaron como coordinadoras de esa agresión, con lo cual demuestra su actitud de ejercer influencia. En el plano diplomático, por otra parte, se está verificando ese intento de articular una OEA sin Estados Unidos, y en la intermediación que tuvo Brasil junto a Turquía en la negociación con Irán, lanzándose a cumplir un papel de jugador mundial, con un rol bastante negativo en el sentido de que fue ablandar a este país, después Hillary Clinton lo retó y abandonó el intento, todo lo cual indica su seria aspiración de llegar al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, ese es el sentido de todos estos hechos.

Lo más estructural sigue siendo el papel de las empresas transnacionales brasileñas que siguen avanzando en una región como América Latina que está creciendo, pero Brasil lo está haciendo de manera más consistente por el volumen de su mercado y de sus exportaciones. El epicentro de este crecimiento son sus empresas que se expanden en la región con proyectos de infraestructura, energéticos y alimenticios que refuerzan ese poder. De ahí viene ese costado hegemónico y el impulso de políticas desarrollistas con discursos progresistas pero que favorecen a quien constituye la principal clase dominante de Suramérica, y frente a la cual tenemos que estar advertidos porque los pueblos de nuestra región no quieren cambiar una opresión por otra, lo que quiere es un curso de emancipación con la población brasileña, con los trabajadores y campesinos del MST que están afectados por las mismas empresas transnacionales.

- Frente a ese análisis, ¿lo que queda como una luz al final del túnel son experimentos integracionistas como la Alianza Bolivariana para América (ALBA)?

- Sí, creo que seguimos globalmente en un momento positivo para la región porque tengamos en cuenta que lo que está ocurriendo es el resultado de fuertes rebeliones que sacudieron a América Latina hace varios años atrás y su eco está influyendo en todo el hemisferio. Voy a dar un ejemplo, en Europa hay crisis y hay ajuste, en Estados Unidos igual, en América Latina es más difícil que se haga porque hay una memoria en la clase dominante de lo que ha sido la gran resistencia popular que está teniendo nuevos actores y nuevos centros de escenario. Tenemos en la región dos luces de optimismo: una es que siguen avanzando los ensayos de proyectos antiimperialistas radicales como el ALBA, y otra, la Cumbre Climática de Cochabamba que ha sido otra manifestación de esa misma tendencia por los participantes, por los movimientos sociales que estuvieron, por el contenido de los discursos, por la tónica anticapitalista de las propuestas, por la idea de un tribunal internacional que juzgue las consecuencias del cambio climático. Cochabamba fue la antítesis de Copenhague y el contraste de lo que es una propuesta sobre este tema recogiendo la tradición del buen vivir de los pueblos originarios de nuestra región.

Y la otra luz que yo veo al final del túnel son nuevos tipos de luchas sociales, es interesante observar que están teniendo otro perfil, estoy pensando esencialmente en la lucha de Perú, que es muy importante. En los dos últimos años hemos tenido dos tipos de grandes resistencias populares: democráticas frente al golpe de Estado en Honduras que fue una resistencia que lamentablemente no logró un triunfo pero demostró que frente a un atropello de esta naturaleza los pueblos reaccionan, y sociales, como se está viendo en Perú donde el centro es la lucha por los recursos naturales. En Bagua se dio un gran triunfo de las poblaciones originarias contra la privatización de los bosques y la destrucción de los recursos naturales, y este tipo de lucha se ve en el movimiento indígena del Ecuador, tiene algunas manifestaciones en Colombia y en Argentina en lo que ha sido el corte de Gualeguaychú por la papelera de Botnia. Es decir, la lucha por los recursos naturales está empezando a ocupar un lugar muy pero muy relevante en toda la región y la apuesta debe ser a la resistencia social de los pueblos.

- ¿Las políticas de amplio calado social que se han puesto en marcha en los países latinoamericanos con gobiernos progresistas, se quedan en asistencialismo o han logrado avanzar en la mejoría de la redistribución de la riqueza?

- Es que hay que distinguir. El nivel de asistencialismo del Estado hacia las mayorías hay que verlo siempre como una conquista popular, no como una prebenda. En la crítica que muchos hacemos a los gobiernos de centroizquierda no podemos caer en el extremo de no observar que es importante que buena parte de los recursos del Estado estén dedicados a los sectores populares. En esto hay dos grandes problemas: el primero es que se congela una situación de desigualdad estructural del ingreso y del empleo. Cuando a través de Bolsa familia en Brasil, o el Ingreso universal a la niñez en la Argentina se socorre a los sectores más afectados, no se está resolviendo el problema de la creación de empleo genuino que es lo que permite salir de la situación estructural de pobreza. Ahí hay una limitación fuerte que podría resolverse de otra manera, creando fuentes de trabajo directamente con los recursos del Estado, con mayor inversión pública y con nacionalización de los recursos básicos. Y el otro tema es que estas políticas coexisten con el mantenimiento de una fortísima desigualdad social. En los países en que se están aplicando estas medidas no hay distribución del ingreso en su real dimensión.

Distribución del ingreso quiere decir que éste es repartido de otra manera. Es decir, que los ricos obtienen una porción más pequeña y los pobres recogen una mayor cuota de ese ingreso. Para hacer esto tienen que haber políticas de naturaleza impositiva que coloquen impuestos progresivos a las grandes fortunas, al movimiento de capitales, al agronegocio, a la minería, y nada de esto se hace. La estructura impositiva y de subsidios es la de siempre y favorece a los grandes grupos concentrados. No es la crítica al gasto social, es la insuficiencia del mismo para resolver el problema de la falta de empleo, de la precariedad laboral, y la desigual distribución del ingreso.

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Por Orlando Caputo Leiva (especial para ARGENPRESS.info)

Agradezco a Graciela Galarce su gran ayuda en la elaboración de este documento.

Existe un amplio reconocimiento de que actualmente a nivel de la economía mundial hay varias crisis simultáneas: económica, energética, alimentaria, del medio ambiente, e incluso, en una perspectiva más general, se habla de crisis sistémica. Sin embargo, cada una de las crisis tiene su especificidad. La crisis económica actual debe ser un objeto de estudio en sí misma. Un análisis concreto de la realidad concreta.
La interpretación económica más difundida, y, en realidad, casi la única interpretación, es que la actual crisis de la economía mundial es una crisis financiera. El Fondo Monetario Internacional, y otras instituciones internacionales han caracterizado así las últimas crisis. La gran mayoría de los análisis críticos de carácter académico y en la esfera política recogen también esta caracterización de la crisis actual como crisis financiera. Los análisis críticos se apoyan en difundidos trabajos teóricos que señalan el predominio del capital financiero sobre el capital productivo.

Desde inicios de esta década, planteamos una posición completamente opuesta pero que ha tenido poca resonancia. En el capitalismo es muy importante el desarrollo del crédito y de las instituciones financieras. La crisis actual se manifiesta como crisis financiera. Pero nada se puede explicar por la manifestación del fenómeno. Es necesario estudiar las causas que lo provocan.

Con la globalización de la economía mundial, y apoyado en la amplia libertad de circulación de mercancías y de capitales, se ha profundizado una estructura de producción y de circulación de mercancías por sobre las economías nacionales, y, comandadas por las grandes empresas trasnacionales productoras de bienes y servicios. Como parte de este proceso, se han producido muchas y profundas transformaciones de la economía mundial a principios de este siglo. (1)

Una de las transformaciones más significativas ha sido el cambio de la preeminencia del capital financiero en la década de los ochenta a la preeminencia del capital productivo en la economía mundial a partir de los noventa. El incremento de las ganancias y de la tasa de ganancia de las empresas productoras de bienes y servicios son tan elevadas, que se han transformado en prestatarias netas del sistema financiero y han dejado de ser clientes significativos del sistema financiero (2). Ambos enfoques interpretativos y su confrontación constituyen el objeto central de este documento.

Síntesis de los planteamientos sobre el predominio del capital financiero.

Francois Chesnais, 2003, en su trabajo “La teoría del régimen de acumulación financiarizado: contenidos, alcances e interrogantes” (3), del encabezado denominado “En este texto se defienden las siguientes posturas” seleccionamos los siguiente

“Desde el periodo 1979-1980, se asiste a la reaparición, después de un lapso de sesenta años, de capital financiero muy concentrado. Las dos ultimas décadas han supuesto, además, el surgimiento y, seguidamente, el pleno desarrollo de mercados financieros que han garantizado a ese capital los privilegios específicos y el gran poder económico y social que se asocia a la “liquidez””

Más adelante señala:

“A partir de mediados de los ochentas el capital financiero ha adquirido una trascendencia que le permite influir significativamente en el nivel y la orientación de las inversiones, así como en la estructura y la distribución de la renta. Esto ha conducido a algunos observadores - poco numerosos, por el momento- a plantear la hipótesis de que el régimen de acumulación que podría erigirse en “sucesor” del régimen “fordista” sería un régimen en torno a unas relaciones, cuyo origen estaría más lejos del contexto de la producción y más cerca del ámbito financiero. Este seria un “régimen de acumulación dominado por lo financiero”, o un incluso un régimen de acumulación financiarizado”

Y más adelante continúa:

“A la vista de las propuestas teóricas de estos autores y de las tendencias que se observan en la historia económica y social de la ultima década, se confirma que el capital que se valoriza bajo la forma de inversión financiera y que comparte intereses con el beneficio empresarial aparece como la fracción dominante del capital, la que se muestra capaz de marcar la pauta de las formas y el ritmo de acumulación”.

Más adelante, en el punto 1 de la Introducción, denominada, “Las diferentes fases en torno a un régimen financiarizado”, Francois Chesnais plantea lo siguiente:

“Probablemente he sido uno de los primeros, sino el primero, en emplear la expresión “régimen de acumulación dominado por lo financiero”. Este concepto me ha servido para designar lo que me pareció una nueva configuración del capitalismo, cuyo contenido económico y social concreto respondería a la influencia, tanto en el orden económico como en el social, de una forma especifica del capital, a la que Marx se refería como “capital que reporta interés” o como “forma moderna de capital dinero”.

Inmediatamente a continuación agrega:

“Como antecedente de esta caracterización, en la primera edición de La mondialisation du capital, se realizaban una serie de observaciones sobre la posición de dominio y el grado de autonomía que parecía haber adquirido este capital. Desde mi punto de vista, el incremento de la importancia de todo lo que se denomina, de forma abreviada, financiero ha estado (y está) unido en forma indisociable a lo que ha constituido el punto de partida de mis análisis, es decir, a la nueva fase de la internacionalización (la de la mundialización del capital)

“El “golpe de Estado” que ha permitido el avance de la dictadura de los prestamistas, en el sentido amplio en el que la concibe André Orlean no hubiese sido posible sin las políticas de liberalización, desregulación y privatización, que no sólo ha afectado al plano financiero, sino que ha repercutido también sobre las inversiones directas en el exterior (IDE) los intercambios de mercancías y de servicios”

Por su parte, Gérard Duménil y Dominique Lévy, señalan “En el capitalismo moderno, las clases de los grandes propietarios de capital está relativamente unificada y posee parte de todos los sectores de la economía (por sus títulos) y las controla (mediante sus instituciones financieras). Eso no impide que las actividades financieras y el sector financiero hayan adquirido, en el neoliberalismo, una mayor importancia. Por una parte, esas actividades se han hecho mucho más rentables y, por otra parte, y, el control de la economía nacional y mundial por las instituciones financieras es crucial para mantener y perpetuar el orden neoliberal. Por esas razones, se habla a menudo de financiarización y de mundialización financiera. (4)

Las tesis de la financiarización y la crisis actual son analizadas en un libro colectivo de 2009. (5)

Nuestra Interpretación: De la preeminencia del capital financiero a la preeminencia del capital productivo

“De la preeminencia del capital financiero a la preeminencia del capital productivo”, es el título de un apartado de nuestro texto “Estados Unidos y China: ¿Locomotoras en la recuperación y en las crisis cíclicas de la economía Mundial?”. (6)

A continuación reproducimos el texto del documento mencionado.

“Una de las transformaciones más importantes es el profundo cambio que se ha procesado entre las diferentes formas del capital en los países capitalistas desarrollados y particularmente en los Estados Unidos. Las empresas productoras de bienes y servicios se han liberado del dominio que en décadas anteriores ejerció sobre ellas el capital financiero.

En la década de los ochenta y a inicios de la década de los noventa, el capital financiero captaba en torno al 35 % de las ganancias de las empresas no financieras. Posteriormente, los intereses netos pagados disminuyen a menos del 20 % de las ganancias. En los períodos de auge, se aproximan al 10 %.

La disminución generalizada de la tasa de interés en los países desarrollados en los últimos años es un antecedente significativo que apoya el proceso de liberalización del capital productivo respecto del capital financiero. Las tasas de interés en Estados Unidos son las más bajas en las últimas cuatro décadas y por varios meses fue fijada en 1 %. En Japón, la tasa de interés real ha sido negativa por un período prolongado.

Las grandes inversiones que se han realizado, se han financiado con el gran crecimiento de las ganancias a través de las ganancias retenidas. También, las inversiones se han financiado con recursos que las empresas han captado directamente colocando acciones y bonos.

Con el aumento de las ganancias y con la disminución de los intereses y más allá de la escasez mayor o menor de capital, parece suficientemente claro que el capital productor de bienes y servicios no financieros en los países desarrollados se ha liberado bastante de la dependencia del capital financiero. Esa dependencia llevó a caracterizar el capitalismo de las últimas décadas como dominado por el capital financiero. Se sigue caracterizándolo de esta forma, lo que nos parece que es un grave error muy difundido y que está presente en la mayoría de los análisis que se ubican al interior de la economía crítica.

El predominio del capital productivo por sobre las otras formas de capital permite asignarle, como es en la realidad, mayor significado a la relación de dominación del capital sobre el trabajo y la sociedad. En el período en que el capital productivo dependía en forma extrema del capital financiero, la relación fundamental aparece entre capitales. La relación capital - trabajo se ubicaba en un nivel bastante inferior. La fuerza con que se plantea en la actualidad la flexibilidad laboral y las formas prácticas que asume, ilustran con claridad que para el sistema en su conjunto, la relación de las empresas con los trabajadores es fundamental.

A diferencia de lo que pasa en los países desarrollados, en América Latina, el capital productivo y el capital financiero actúan conjuntamente, potenciándose. Así sucede al interior de los países de América Latina en que se produce una relación muy estrecha entre el sistema productivo y financiero.

Esta situación se presenta también y con mayor claridad en las inversiones extranjeras que ingresan a la región. La inversión extranjera directa contempla una proporción significativa de créditos internacionales asociados. Se puede decir que en América Latina el capital productivo y el capital financiero actúan en forma redoblada tras la persecución de utilidades e intereses elevados. Este es un elemento fundamental que explica el desarrollo desigual entre Estados Unidos y América Latina y también las dificultades de reproducción económica y social en la región.

En el documento citado, y en otros documentos (7), hemos analizado las principales transformaciones de la economía mundial a inicios del siglo XXI. Basado en dichos estudios, nuestra interpretación teórica e histórica es diferente y opuesta a la caracterización simple como crisis financiera. Constatamos que a nivel de la economía mundial, las ganancias y la tasa de ganancia de las grandes empresas trasnacionales productoras de bienes y servicios, se han incrementado a partir de mediados de la década del ochenta y se han mantenido elevadas en los últimos años, previos al inicio de la actual crisis mundial. Estas elevadas ganancias transformaron a estas empresas en prestamistas netas del sistema financiero. Sus inversiones, compra de empresas y fusiones han sido financiadas en gran parte con recursos propios provenientes de sus grandes ganancias.

Las grandes empresas productoras de bienes y servicios dejaron de ser clientes significativos del sistema financiero. Los grandes fondos acumulados por el sector financiero, que incluyen las inversiones financieras de una parte de las ganancias de las empresas, sumados a otros fondos, fueron orientados hacia las empresas tecnológicas provocando posteriormente la crisis de las empresas punto com y la crisis económica mundial de 2001. En la década actual, se suman a las grandes ganancias de las empresas productoras de bienes y servicios, los fondos soberanos y las incrementadas reservas internacionales provenientes también de la economía real.

Para superar la crisis del año 2001, estos grandes fondos financieros generados en la economía real, fueron orientados hacia la construcción habitacional acompañados de masivos créditos hipotecarios. La crisis no es sólo se manifiesta como crisis financiera, sino como crisis inmobiliaria, que incluye al sector real y al financiero.

El FMI ha caracterizado las últimas crisis, como crisis financieras, desplazando la importancia de la producción y de la distribución a nivel mundial, entre ganancias, renta de los recursos naturales y remuneraciones de los trabajadores. La caracterización como crisis financiera es ampliamente asumida por la academia, por otras instituciones internacionales y por los medios de comunicación, incluyendo una parte significativa del pensamiento crítico

El gran aumento de las ganancias de las empresas trasnacionales proviene de una disminución de los salarios y de la renta de los recursos naturales a nivel mundial

La globalización de la economía mundial fue una respuesta a los bajos niveles de la masa de ganancia y de la tasa de ganancia en la década del setenta y hasta mediados de la década del ochenta. En las últimas décadas, las elevadas ganancias de las grandes empresas trasnacionales productoras de bienes y servicios, son el resultado de la globalización actual y del neoliberalismo en la economía mundial.

La globalización a nivel mundial ha significado un fuerte aumento de la producción mundial al mismo tiempo que ha limitado las capacidades de consumo. El gran desarrollo del sistema de crédito y el elevado endeudamiento generalizado, ha posibilitado el funcionamiento de la economía mundial, ajustando la demanda a la oferta en las últimas décadas previo a la crisis actual. El gran desarrollo del sector inmobiliario, el incremento del gasto militar, el aumento del consumo con créditos permitió la superación de la crisis de inicios de esta década. La burbuja inmobiliaria incentivada por las bajas tasas de interés, asociada a créditos de alto riesgo, culminó con el rompimiento de la burbuja inmobiliaria, -y no sólo financiera-, ya que la construcción residencial es uno de los sectores reales más importantes de la economía.

En el documento “Crisis de la Economía Mundial…” (8), en el apartado ‘De la Crisis Inmobiliaria en Estados Unidos a la Crisis de la Economía Mundial’, señalamos cómo los elevados niveles de ganancia de las empresas productoras de bienes y servicios en Estados Unidos, inicialmente resistieron la crisis inmobiliaria que se prolongó por varios años, hasta que las ganancias fueron afectados en forma significativa a mediados de 2008, y con pérdidas muy elevadas, especialmente en el sector automotriz. Las disminuciones de las ganancias transformaron la crisis inmobiliaria de Estados Unidos, en crisis de la economía mundial.

En los documentos citados, habíamos analizado las seis crisis cíclicas del capitalismo a partir de 1974.hasta la de inicios de esta década. Estas seis crisis cíclicas se producen al interior del proceso de globalización. La crisis mundial actual es mucho más profunda, es una crisis de la globalización actual de la economía mundial y del neoliberalismo.

Las diferencias teóricas sobre el tipo de capital dominante en la economía mundial, dan cuenta de diferencias opuestas en relación a múltiples categorías económicas y comportamiento dinámico de la economía mundial, de las cuales desarrollaremos en este documento, tres que nos parecen principales:

En la producción nacional y mundial, y en general, en la dinámica de la reproducción del capitalismo.

El comportamiento de la masa y de la tasa de ganancia de las empresas productoras de bienes y servicios (las empresas no financieras)

La distribución de la producción en: salarios, ganancias y renta de recursos naturales, a nivel de los países y a nivel mundial.

Diferentes interpretaciones sobre la crisis y los planteamientos sobre la producción nacional y mundial

En nuestros estudios, hemos concluido que Estados Unidos logró en la década del noventa una profunda reestructuración económica que le permitió reconquistar la hegemonía que en la década del ochenta había compartido con Europa y Japón.

En la década del ochenta se afirmaba que la economía decadente de Estados Unidos sería desplazada por Japón. No sucedió ni lo uno ni lo otro. Japón entró en una profunda y prolongada crisis, en tanto Estados Unidos reestructuró su economía, logrando niveles elevados de ganancia y recuperación significativa de la tasa de ganancia acompañada de un gran crecimiento de las inversiones. (9)

Conclusiones completamente opuestas a nuestros estudios son los desarrollados por Jorge Beinstein, que está vinculado a las tesis de la financiarización. El titulo del trabajo de Jorge Beinstein no ofrece dudas: “Las crisis en la era senil del capitalismo” (10). En este documento afirma:

“El capitalismo mundial ingresó en la etapa senil en los años 1970 cuando el parasitismo devino hegemónico a lo largo de dicha década”

Y más adelante desarrolla las siguientes afirmaciones:

“Un primer indicador de senilidad es la decadencia de los Estados Unidos, resultado de un largo proceso de degradación”

“Un segundo indicador de senilidad es la interacción entre dos fenómenos. La hipertrofia financiera global y la desaceleración en el largo plazo de la economía mundial”

Inmediatamente agrega:

“A comienzos del siglo XXI hemos llegado a la financierizacion integral del capitalismo, las tramas especulativas han impuesto su “cultura” cortoplacista que ha pasado a ser el núcleo central de la modernidad. Presenciamos un circulo vicioso; la crisis crónica de sobreproducción iniciada hace cuatro décadas comprimió el crecimiento económico desviando excedentes financieros hacia la especulación cuyo ascenso operó como un mega aspirador de fondos restado a la inversión productiva”

En nuestro documento “Estados Unidos y China…”, en el capítulo ‘Las transformaciones de la economía de Estados Unidos’, basado en las estadísticas del Departamento de Comercio de dicho país, mostramos el gran crecimiento de las ganancias globales y de la tasa de ganancias, la fuerte disminución de los intereses netos pagados por las empresas no financieras al sector financiero, la disminución de los impuestos a las ganancias Mostramos también, en forma adicional, y en la perspectiva de la actuación de las empresas de los Estados Unidos en la economía mundial, el papel creciente de las ganancias en el exterior de las empresas estadounidenses.

Para señalar la dinámica económica mostramos el gran crecimiento de las inversiones en Estados Unidos desde fines de la década del cincuenta hasta inicios de 2004, fecha en que elaboramos dicho documento. Destacamos el gran crecimiento de la inversión a partir de mediados de la década de ochenta. Mostrando adicionalmente, el gran crecimiento de las inversiones en equipo y maquinaria de alta tecnología, frente a un bajísimo crecimiento de las inversiones en los edificios de las empresas. “En síntesis, las grandes inversiones en equipo de alta tecnología, en vez de ampliar la base tecnológica existente, han reemplazado a los equipos anteriores usando las mismas estructuras físicas de las empresas, constituyendo otra característica esencial de la reestructuración en la economía estadounidense”. (11)

Señalábamos también, la fuerte disminución de los precios de las maquinarias y equipo de alta tecnología y agregábamos:

“Desde el punto de vista de la economía política, esto significa una disminución de una de las partes principales del capital constante, que Marx había previsto junto a otras modificaciones para períodos en que en vez de producirse la tendencia decreciente de la tasa de ganancia, esta empieza a crecer”.

La producción y la inversión de Estados Unidos.

A continuación mostramos el crecimiento de la Producción al interior de los Estados Unidos en el período 1952-2009. Como se puede observar en la gráfica, la Producción al interior de Estados Unidos -en dólares constantes-, ha tenido un gran crecimiento especialmente, en las últimas décadas y previo a la crisis actual.

caputo-1

Otro tanto ha sucedido con a inversión privada en Estados Unidos. El crecimiento ha sido muy significativo, especialmente, a partir de la crisis de inicios de la década del ochenta, como resultado de la globalización y del neoliberalismo que favoreció a las inversiones empresariales. Este gran crecimiento está asociado a un comportamiento cíclico muy acentuado. En el auge muestra un gran crecimiento y en la crisis muestra una profunda caída de la inversión. Si a la inversión privada se agrega la inversión pública, la inversión global de los Estados Unidos por varios años ha sido superior al 20% del PIB. Esta inversión pública incrementa la inversión global al mismo tiempo que suaviza su caída en las crisis.

 

caputo-2

La realidad muestra que Estados Unidos ha tenido una dinámica significativa que se refleja en un gran crecimiento de la producción y de las inversiones al interior de Estados Unidos.

En un escenario de análisis que supere la visión de economía internacional que remite a relaciones entre naciones y que considere la economía mundial como una estructura productiva y de circulación de las mercancías por sobre las economías nacionales, la producción y las inversiones en el mundo, por parte de la empresas estadounidenses, incrementan cualitativamente el dinamismo de la economía de los Estados Unidos.

La producción mundial

En la vida cotidiana y en la conciencia social pensamos que está instalada fuertemente la idea de que a nivel mundial hay un gran crecimiento de la producción y una amplia competencia que se observa a diario en las más variadas mercancías. La siguiente gráfica muestra un gran crecimiento de la producción mundial. En el período 1982-1991, la producción promedio anual era un poco superior a 21.000 mil millones de dólares medidos según la paridad de poder de compra y sube en 2008 a cerca de 70.000 mil millones de dólares. En ese período la producción en paridad de poder de compra se incrementa en 225%, y, medido en dólares a tipo de cambio de mercado se incrementa en 263%.

caputo-3


La negación del estancamiento es evidente. El capitalismo a nivel mundial tiene un gran crecimiento con un doble resultado. En primer lugar, limita las capacidades de consumo y promueve el endeudamiento generalizado de las familias y de los Estados. En segundo lugar, y tan importante como lo anterior, es que el gran crecimiento de la producción está destruyendo la naturaleza. Si China sigue reproduciendo los niveles de consumo de Occidente, no hay recursos naturales en el mundo que puedan sostener dicho crecimiento. El capitalismo entra en crisis no porque produzca poco, sino, porque produce demasiado.

Las ganancias de las empresas productoras de bienes y servicios en las diferentes interpretaciones.

Como hemos señalado en nuestros estudios, se muestra que a nivel mundial y en los países ha existido un gran crecimiento de las ganancias y de la tasa de ganancia. Estas grandes ganancias del capital productivo, financian gran parte de las ampliaciones de las empresas a nivel nacional y mundial, las fusiones y compras de empresas. Las ganancias son tan elevadas que parte significativa de ellas son colocadas en el sistema financiero. Las empresas productoras de bienes y servicios - el capital productivo-, se han transformado en prestamistas netas del sistema financiero. Han dejado de ser clientes significativos del sistema financiero.

Pero previo a la crisis, las ganancias y la tasa de ganancias que habían crecido fuertemente en las últimas décadas empiezan a disminuir. El comportamiento de las ganancias y de las tasas de ganancia, en la explicación del origen y desarrollo de la crisis actual, es fundamental.

Nuestro análisis es completamente opuesto al de Robert Brenner, quien afirma que las economías desarrolladas, y, particularmente, en Estados Unidos, continua la larga fase descendente debido a la caída generalizada de la rentabilidad de las empresas (12). Para él también la causa principal de la crisis actual, se debe a la baja tendencial de la tasa de rentabilidad de las empresas productoras de bienes y servicios. (13)

De la entrevista de febrero de 2009, destacamos las siguientes afirmaciones de Robert Brenner.

“El principal origen de la crisis actual está en el declive en el dinamismo de las economías avanzadas desde 1973 y, especialmente desde 2000. El crecimiento económico en Estados Unidos, Europa Occidental y Japón se han deteriorado seriamente en cada ciclo en términos de indicadores macroeconómicos muy estándar: …”

Frente a la pegunta de cómo explicaría el debilitamiento a largo plazo de la economía real desde 1973, lo que usted llama la larga caída:

En su respuesta afirma:

“Lo que lo explica es sobretodo un declive profundo y duradero de la tasa de rendimiento en inversión de capital desde finales de los sesenta. La incapacidad de recuperar la tasa de beneficio es lo más destacable a la vista de la enorme caída de los salarios reales durante el período. La causa principal, aunque no la única, del declive de la tasa de beneficio ha sido una tendencia persistente a la sobrecapacidad de las industrias manufactureras mundiales”

Otra pregunta: Aún concediendo que el capitalismo de posguerra hubiera entrado en un período de larga caída en los años setenta, parece innegable que la ofensiva capitalista neoliberal ha impedido el empeoramiento de la caída de la producción desde los ochenta”

Respuesta:

“Si por neoliberalismo se entiende el giro hacia las finanzas y la desregulación, no veo cómo puede haber ayudado eso a la economía. Pero si por neoliberalismo se entiende el desmedido asalto de los empresarios y los gobiernos a los salarios obreros, a las condiciones laborales y al Estado de Bienestar, la cosa ofrece pocas dudas: se ha impedido que la caída de la tasa de beneficio haya sido todavía peor”.

Parte final de la respuesta a la pregunta sobre la globalización:

“En otras palabras, la globalización ha sido una respuesta a la rentabilidad menguante; pero como las nuevas industrias, lejos de ser esencialmente complementarias en la división mundial del trabajo, son redundantes, el resultado ha sido la persistencia de los problemas de la rentabilidad”.

Como queda suficientemente claro, las conclusiones de nuestros estudios son completamente diferentes a las de Robert Brenner.

En vez de estancamiento de la producción, se constata un fuerte crecimiento tendencial. En vez de la tendencia decreciente y bajos niveles de tasas de ganancia de largo plazo, mostramos un gran crecimiento de la masa y tasa de ganancia a partir de mediados de los 80’s como resultado de la globalización y del neoliberalismo

A partir de esos elevados niveles de ganancias y tasa de ganancia, mostrábamos que ellas podrían ser afectadas por el incremento de la competencia a nivel internacional en condiciones de una sobreproducción mundial de productos industriales, especialmente, de alta tecnología, y subproducción o escasez de energéticos, materias primas y en un grado menor de alimentos. Destacábamos un cambio muy significativo a nivel de la economía mundial, de términos de intercambio desfavorable a términos de intercambio favorables para las materias primas. El incremento de la competencia provocaría una disminución de precios al mismo tiempo que un aumento de los costos que podría afectar las ganancias de las empresas. (14)

La disminución de las ganancias se produce antes de la crisis que ilustrábamos en el documento “La crisis Inmobiliaria en Estados Unidos. La eventual séptima crisis de la economía mundial” (15) de mediados de 2007 y publicado en 2008. La crisis actual es mucho más profunda que una crisis cíclica.

Las Ganancias de las Empresas de Estados Unidos en Estados Unidos y en el Resto del Mundo

A continuación y como crítica a Robert Brenner, presentamos primero, el comportamiento de la masa de ganancia entre 1950 y 2009. Posteriormente, mostraremos el comportamiento de la tasa de ganancia desde 1960 hasta años recientes.

 

caputo-4

Como se observa en la gráfica, entre 1965 y mediados de la década del ochenta -veinte años-, las ganancias globales de Estados Unidos tuvieron un estancamiento.

Desde mediados de la década del ochenta y relacionado con la globalización, las ganancias tienen un incremento extraordinarias, con disminuciones por la crisis de 2001 y en la crisis reciente, -cuyo inicio en Estados Unidos ha sido señalado en el cuarto trimestre de 2007- las ganancias han disminuido pero se mantienen en niveles elevados.

Ganancias de las empresas de Estados Unidos en otros países del mundo

El crecimiento de las ganancias de las empresas de Estados Unidos en otros países ha crecido mucho más que las ganancias en Estados Unidos. El crecimiento ha sido extraordinario, a partir de mediados de la década del ochenta en que eran alrededor de 50 mil millones de dólares. En la década del noventa, en promedio suben a alrededor de 100 mil millones de dólares. A inicios de 2000, suben a 200 mil millones de dólares. En 2004 y 2005, suben a alrededor de 400 mil millones de dólares y en 2007 y 2008, superan los 500 mil millones de dólares. Estas ganancias en el exterior en los últimos años son tan significativas si se compara con los planes iniciales de rescate de los Estados Unidos que fueron en torno a 700 millones de dólares.

 

caputo-5

Estados Unidos: Las ganancias recibidas del exterior como porcentajes de las ganancias en EEUU

Las ganancias recibidas desde el exterior entre 1950 y 1965 eran menores al 8% en relación a las ganancias obtenidas por las empresas en Estados Unidos. En la década del 2000, superan el 30%. En 2007, aumentan al 42,3% y en 2008, las ganancias de las empresas estadounidenses en el exterior, equivalen al 55% de las ganancias de las empresas en Estados Unidos.

caputo-6


Hasta fines de la década del noventa, las ganancias del sector manufacturero (sector industrial en Estados Unidos, eran mayores que las ganancia de las empresas estadounidenses en el exterior.

A partir de inicios de 2000, se da un cambio histórico, las ganancias globales en el exterior son mayores a las ganancias en el sector manufacturero (sector industrial) en Estados Unidos, que incluye todas las empresas de bienes durables y no durables (en bienes durables, la industria espacial, maquinaria y equipo, electrónica, computación, etcétera.

Esta información, confirma las limitaciones y los errores a que puede conducir el enfoque teórico-metodológico en la ciencia económica que tenga como escenario fundamental las economías nacionales. Las economías nacionales deben ser analizadas a partir de un escenario de economía mundial. La existencia objetiva de la economía mundial, como una totalidad superior a la existencia objetiva también de las economías nacionales, no sólo se manifiesta en la estructura productiva y su circulación mundial de las mercancías por sobre las economías nacionales, sino que se manifiesta también a nivel de la reproducción del sistema a través de las categorías fundamentales del capitalismo como son las inversiones, la masa de ganancia y la tasa de ganancia.

Notas:

1) Caputo, Orlando 2007. “La Economía Mundial a Inicios del Siglo XXI” en Gandásegui (Hijo), Marco A (coordinador) Crisis de Hegemonía de Estados Unidos, (México DF: Siglo XXI y CLACSO).

2) Caputo, Orlando 2010 “Crisis de la Economía Mundial: Aumento de las ganancias y disminución de salarios”, en Gandásegui (Hijo), Marco A y Castillo Fernández, Dídimo (Coordinadores)

3) Estados Unidos. La Crisis Sistémica y las Nuevas Condiciones de Legitimación, (México DF: Siglo XXI y CLACSO)

4) Chesnai, Francois 2003 “La teoría del Régimen de Acumulación Financiarizado: Contenido, Alcances e Interrogantes”, Revista de Economía Crítica Nº 1, Valladolid, España.

5) Duménil Gérard y Lévy, Dominique 2005 El Imperialismo en la Era Neoliberal, en Revista de Economía Crítica Nº 3, (Valladolid España).

6) Chesnais, Francois, de Brunoff, Suzane, Duménil, Gérard, Hussan, Michel y Lévy, Dominique 2009. Las Finanzas Capitalistas. Para Comprender la Crisis Mundial (Buenos Aires: Ediciones Herramienta)

7) Caputo, Orlando 2005 (2004) “Estados Unidos y China: ¿Locomotoras en la recuperación y en las crisis cíclicas de la economía mundial?” en Estay, Jaime (comp.) La Economía Mundial y América Latina, (Argentina: CLACSO)

8) Caputo, Orlando. 2007, op cit

9) Caputo, Orlando. 2007. Op cit

10) Caputo, Orlando 2003 (2001) “La economía de Estados Unidos y de América Latina en las últimas décadas”. Ponencia presentada en el Foro Social Mundial, Porto Alegre, Brasil, 2001, en OIKOS (Santiago; Universidad Católica Raúl Silva Henríquez,) Nº 16

11) Beinstein, Jorge. 2009 “Las crisis en la era senil del capitalismo. Esperando inútilmente al quinto Kondratief”, en El Viejo Topo, (España) Nº 253
12) Caputo, Orlando. 2005 (2004), Op. Cit

13) Brenner, Robert. 1999, Turbulencias en la Economía Mundial. (Santiago, LOM Ediciones)

14) Brenner, Robert, 2009, Entrevista de Seogin Jeong ,” Un análisis histórico económico clásico de la actual crisis”, www.rebelion.org,

15) Caputo, Orlando 2005 (2004) Op. cit.

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Por Patricio Guzmán

Cuando se habla del sistema financiero en Chile, normalmente vienen a la mente los bancos y las empresas que les prestan servicios externos, si vamos un poco más allá incorporamos a las AFP, las compañías de seguro, mercados especializados como la Bolsa de comercio, pero en general no le damos la relevancia que merece el sector del retail en el sector financiero, una zona gris entre lo comercial y financiero que ha tenido tres décadas de crecimiento explosivo, y endeudamiento masivo.

El sector llamado ‘retail’ (Cadenas de tiendas de consumo masivo) es uno de los negocios con mayor crecimiento en la economía chilena y además es un segmento que encabeza la internacionalización de las grandes empresas. El retail combina la venta al por menor de los más variados artículos, junto con la universalización del crédito hacia sectores cada vez más amplios y diversos, incluyendo a los que tradicionalmente habían sido dejados de lado por el sistema bancario tradicional, segmentos en los que se incluyen tanto masas de compradores como de comercio menor que ofrece crédito a través de las tarjetas retail.

Comité de Retail Financiero: Contra la base única de deudores.

Las principales empresas del sector: Falabella, Cencosud, Ripley, La Polar y D&S Wal-Mart están agrupadas en el Comité de Retail Financiero, la asociación de grandes empresas del retail.

Entre ellas, solamente D&S que maneja Líder y Ekono, centros comerciales y marcas propias, es de capitales extranjeros. Ya que la familia Ibáñez, los propietarios iniciales la vendieron a Wall Mart, el gigante más grande en el mundo en el rubro, de capital norteamericano.

El comité se ha opuesto públicamente a la idea de legislar para que exista una base única de deudores que sume la información de deudores del sector bancario y retail, con el argumento que es una cuestión de privados, y que beneficiaria a los bancos pero no a ellos. El registro posiblemente develaría la gravedad del sobre endeudamiento en Chile, y frenaría la concesión de muchos nuevos préstamos, con lo que la bicicleta de los deudores que toman créditos para pagar podría caerse.

Este sector con su glamour, sus luces, colores, espacios amplios y gratos, es responsable de gran parte de la sensación de progreso y ascenso social que embarga desde hace un par de décadas a sectores crecientes de la población. Los grandes del retail son las tiendas ‘anclas’ de los mall, los nuevos templos de los adoradores del consumo, el Moloch contemporáneo en cuyas llamas se consumen los sobre endeudados. Los centros comerciales, a los que tarde o temprano todos acudimos, son un negocio inmobiliario en el que las cadenas de retail tienen una gran participación.

La zona gris del sistema financiero.

Hace mucho que el principal negocio del sector Retail de la economía dejó de ser prioritariamente comercial, para pasar a ser principalmente financiero. Las cadenas de retail más importantes ya cuentan con sus propios bancos; es el caso de Banco Paris, Banco Falabella, Banco Ripley.

En realidad los productos que se venden en sus cadenas de tiendas, sirven para prestar dinero a altas tasas de interés. El 70% de las ventas se realiza con tarjetas de crédito. Con la ventaja sobre la banca tradicional, que no están sujetos a las regulaciones legales del sector bancario y la fiscalización de ninguna superintendencia financiera. El retail encontró la manera de sacar beneficio del alto porcentaje de la población chilena no bancarizado, o al menos no plenamente bancarizado, porque no constituye sujeto de crédito para los bancos por sus ingresos bajos, y falta de garantías reales. El mayor riesgo potencial, y la dificultad de obtener crédito en otras fuentes, permiten a estas cadenas cobrar intereses francamente abusivos, muy superiores a los de la banca tradicional. Gran parte del sobre endeudamiento, que según estadísticas oficiales alcanza a cuatro quintiles de los chilenos, cuyos gastos superan a sus ingresos, especialmente de los jóvenes, se explica por las agresivas políticas de colocación de crédito de estas cadenas.

Pero no hay que creer que la venta masiva ha dejado de ser un negocio en si misma para estas gigantescas cadenas, los grandes volúmenes les permiten acceder a precios y condiciones casi sin competencia, y a marginar en algunos artículos, como la ropa importada de Asia, márgenes de ganancia, que pueden llegar hasta 14 veces el precio de costo puesto en Chile. Es decir un increíble 1.400%.

El impacto de la crisis global en Chile, especialmente en el año 2009 cuando se produjo la mayor contracción de la demanda del consumidor, mostró a los empresarios la debilidad de apostar puramente por el negocio financiero. En la revista Capital,  El gerente general de Paris, Jaime Soler lo expresó de la siguiente manera: “yo siento que la mirada nuestra y de la industria está cruzada por tener una operación más responsable, por ver cómo sustentar el formato. En Chile, el retail fue conceptualizado bajo la premisa de que era un negocio financiero, pero el desafío ahora está en cómo yo hago este negocio rentable, cómo sustento el formato por sí solo, porque finalmente el negocio financiero también tiene sus amenazas. Yo siento que ahí está el primer gran cambio que se viene”.([1])

En un artículo de la misma revista, el gerente general de La Polar, Nicolás Ramírez, plantea los cambios de la industria tras la crisis. “Todos los kilos y kilos de catálogos ya no serán la tónica. Ahora hay una micro segmentación e Internet pasará a ser una herramienta estratégica, así como la eficiencia que deberá lograr cada vendedor, que tendrá que ser capaz de hacer una colocación integral sobre departamentos que van más allá del suyo”.([2])

Sobreendeudamiento.

Las estadísticas muestran que cuatro quintiles de la población chilena gasta más de lo que percibe como ingresos. ¿Cómo puede lograrse esto? Gastando el patrimonio acumulado, o adquiriendo deudas. Diferentes estudios han mostrado la magnitud del sobre endeudamiento en Chile. El problema es transversal, se encuentra en todos los sectores de la población, solo se libra el grueso del 20% de mayores ingresos. Pero afecta más a los trabajadores de menos ingresos. Los más endeudados son personas que ganan menos de $400.000.

Un estudio de Origina [3], realizado sobre una muestra de 6.719 personas, reveló que 50% de los trabajadores debe nueve veces o más su renta bruta y destinan sobre el 50% de su sueldo liquido a pagar mensualmente préstamos de consumo. De ellos más del 25% debe más de doce veces su renta bruta mensual.

Se supone que una persona está sobre endeuda cuando su deuda supera siete veces su ingreso bruto, o que destine más del 20% de su sueldo mensual al pago de las obligaciones derivadas de las deudas, o simplemente que no sea capaz de cancelar intereses más capital. El estudio de Origina mostró una situación generalizada que supera estos parámetros.

El sobre endeudamiento actúa como una reducción de la remuneración, la gente continúa financiando su nivel de consumo y el pago de la deuda anterior, con niveles crecientes de endeudamiento, o sea se solicitan préstamos para pagar deudas y consumir, hasta llegar a un punto de crisis, cuando ya no es posible acceder a nuevos créditos adicionales que permitan seguir viviendo en este juego popularmente conocido como ‘la bicicleta’.

De acuerdo con el estudio de Origina, solamente un 30% de los sobre endeudados cayó en esta situación por eventos catastróficos, como enfermedades. El resto, la mayoría simplemente cree que se puede vivir permanentemente con un nivel de consumo superior al que los ingresos le permiten.

Estas cifras indican que estamos cerca de una bomba de tiempo, el acceso al consumo mediante el crédito crea una percepción de bonanza, puede estimular la economía, pero se trata de una ‘burbuja’. Una situación de morosidad generalizada puede desencadenar una crisis de proporciones, con efecto dominó. De hecho fue una cosa que ocurrió así, con las llamadas ‘hipotecas tóxicas’ en los Estados Unidos, lo que gatilló la crisis global, en 2008. La “Gran Recesión” entre cuyas consecuencias todavía se encuentra el mundo.

Jóvenes con deudas y morosos antes de trabajar.

Según los datos recogidos en la sexta Encuesta Nacional de Juventud, la situación de los jóvenes es peor si cabe. De acuerdo con información recogida por el Instituto Nacional de la Juventud, en 2009, en la Sexta Encuesta Nacional de la Juventud, más del 50% de los jóvenes está endeudado, y de ellos 6 de cada 10 deja de pagar lo que debe, es decir entra en la categoría de moroso, y de paso en Dicom (el sistema de información de morosidad con amplias consecuencias posteriores en temas tan relevantes como el acceso al empleo).

De estos jóvenes deudores, el 57,3% de los casos es con tiendas comerciales, el 33,7% está endeudado con los bancos.

16,1% de los jóvenes toman créditos para pagar sus estudios, y 3.5% está endeudado con crédito hipotecario, el resto es mayoritariamente para consumir.

De acuerdo con el estudio del INJUV, un porcentaje del 29,2% de los jóvenes que han contraído deudas se encuentra en mora, es decir, está atrasado en los pagos. De este número el 32,5% está atrasado con empresas retail.

El 59,3% de los jóvenes endeudados declaró en el estudio que su principal fuente de ingresos es el dinero que reciben de sus padres. Muchos padres se enteran que sus hijos tienen tarjetas de crédito, o están sobre endeudados, cuando comienzan a llegar las cartas de cobranza a sus casas. Las empresas retail saben que los jóvenes no tienen capacidad de pago. Pese a su condición juvenil (entre 15 y 29 años), o tal vez precisamente por ella,  y a sus pequeñas fuentes de ingresos, las instituciones financieras han definido a los jóvenes como clientes, logrando endeudar a más de la mitad de la población juvenil, en realidad cuando son estudiantes ni siquiera les piden que estén trabajando, se dan por satisfechos con ‘capturarlos’ desde jóvenes, esperando que como profesionales jóvenes en el futuro cercano sean buenos clientes, mientras tanto esperan que sus padres terminen haciéndose cargo de sus deudas. Cuando los padres los obligan a cerrar sus tarjetas, ya hay una obligación contraída para pagar.

Inversiones en el extranjero

Después de crecer sin parar en Chile llegó el momento que las cadenas miraron mercados en otros país. Los destinos han sido principalmente Argentina, Perú, Brasil y Colombia.  Ya en 1993 Falabella comenzó su internacionalización con la entrada a Argentina mediante la apertura de una tienda en Mendoza. Le siguieron luego locales en Rosario, Córdoba, San Juan y Buenos Aires.

Las otras cadenas comerciales siguieron sus pasos engrosando el número de las ‘multilatinas’ chilenas, las empresas que han saltado fuera de las fronteras.

Según el diario Estrategia: “De acuerdo a un estudio elaborado por Deloitte, en el cual se mide a las 250 empresas de retail con mayores ventas, la compañía ligada a Horst Paulmann, Cencosud, lideró por primera vez el ranking de este año a nivel latinoamericano, desplazando al segundo lugar a la brasilera Grupo Pao de Acúcar, que por años había permanecido a la cabeza de la medición. Con ventas por US$11.226 millones en el año fiscal americano 2008–2009, la chilena ocupa el puesto 80 a escala mundial, 32 escaños más arriba que en 2009. En un artículo de El Mercurio de 12 de enero de 2010, respecto a al misma noticia, informa que “Cencosud se ubica en el lugar número seis de los retailers con mayor crecimiento (el año pasado era el 10) y la sigue Falabella en el puesto 15 (cuatro puestos más arriba que el año anterior). A pesar de la crisis económica mundial, América Latina logró posicionar por primera vez 10 empresas dentro del ranking de las 250 mayores empresas de ventas al detalle. Éstas siguen proviniendo sólo de tres países: México, Brasil y Chile.”

El modelo, de consumo sostenido por el endeudamiento más allá de lo razonable avanza voraz por el continente, con su promesa engañosa de mejor nivel de vida.

Detrás del sobre endeudamiento se esconde el punto de no retorno, cuando nuevos créditos para pagar deudas dejan de ser una opción y se generalizan las deudas impagas, con el peligro del contagio y la crisis en todo el sistema. Es la fragilidad de un modelo basado en la quimera que se puede gastar sistemáticamente más de lo que los ingresos permiten realmente.

Notas:

[1] La industria Retail en Chile 2010 - Revista Capital, número 270 (26 de febrero al 11 de marzo de 2010)

[2] Idem.

[3] EMOL. Blogs. Julio Pizarro V. Estudio revela que 50% de los trabajadores debe nueve veces o más su renta por consumo. 10 de septiembre 2010.

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