Por Maximiliano Fuentes

El heroico pueblo de Egipto a través de arduas jornadas de lucha ha derrocado el gobierno dictatorial de Hosni Mubarak.  Este hecho ha marcado un proceso revolucionario en Egipto. Sin embargo, pese a la victoria, el poder político lo ha asumido las fuerzas armadas del Estado. Lo anterior es muy importante, dado que de esa forma podemos señalar el carácter del proceso, dado  quien tiene el control del aparato del Estado son las fuerzas represivas del Estado. No son las instituciones y organizaciones de la clase obrera de Egipto quien dirige el gobierno, son las fuerzas represivas del Estado. Así mismo, estas empezaran a jugar un rol importante en la manutención del poder político y junto a fuerzas reaccionarias del país empezaran a desviar las intensas movilizaciones para darle paso a un régimen democrático burgués. Sin duda alguna los acontecimientos en Egipto tendrán una decisiva repercusión en el mundo, especialmente en el Medio Oriente.  Primero fue el derrocamiento de la dictadura de Ben Alí en Túnez y al mes siguiente tenemos la noticia del derrumbe de la dictadura de Mubarak.

Barack Obama, Presidente de los Estados Unidos ha declarado en los distintos medios de comunicación la orientación política del país  imperial que pasa por edificar un régimen provisional para introducir una transición pacífica a la democracia burguesa.

Ante todo lo anterior, resulta evidente deducir que la revolución de Egipto se encuentra en la encrucijada, o avanza a un proceso donde sea el pueblo que dirija su propio destino, o serán las fuerzas reaccionarias junto a los Estados Unidos que implementaran su política neocolonialista. Pese a todo, el pueblo organizado de Egipto nos ha mostrado que solo la movilización popular y la huelga general son los instrumentos de lucha que garantizan la victoria.

Un ejemplo a imitar

El ejemplo de lucha y de los métodos empleados por el pueblo de Egipto para la obtención del cumplimiento de los objetivos propuestos por las organizaciones gremiales, sindicales y populares es muy importante para la educación política  del pueblo de Honduras, sobre todo en un momento donde sectores oportunistas han impuesto como método de lucha la plataforma electoral a través de alianzas sin principios. Es válido señalar la opinión de estos dirigentes, concretamente la de Bartolo Fuentes -coordinador departamental del FNRP de Yoro- quien a través de un documento ha expresado la clara intención de estos sectores de conducir al FNRP al terreno de los golpistas, de sus instituciones y de sus propias leyes. “….si queremos dar la batalla para arrebatarle el poder a los oligarcas tenemos que tener el instrumento específico para ello. Como esa disputa por el gobierno hasta ahora está claro que tiene que ser en el terreno electoral, entonces no hay duda que necesitamos tener nuestro movimiento político electoral.”

Para los marxistas revolucionarios la participación electoral puede ser considerada una táctica en relación a lo estratégico pero no como uno de los fines supremos. El compañero Bartolo Fuentes tácitamente nos dice que para este momento la lucha pasa por el terreno electoral, en ese sentido nosotros le preguntamos: ¿Cómo garantizará la conducción política del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) un proceso transparente cuando quienes dirigen el Tribunal Supremo Electoral (TSE) son los representantes de los partidos políticos que emprendieron el golpe de Estado, esto más, quienes custodian el material electoral durante el sufragio y su posterior conteo son las fuerzas armadas del país, es decir quienes quebraron el orden constitucional y enlutaron a miles de familias a través de asesinatos a dirigentes gremiales y miembros de la resistencia?

Por otro lado, una de las principales razones que expusieron los dirigentes del Frente en el pasado proceso electoral para no votar, es decir para llamar a no participar de las elecciones de los golpistas era la naturaleza del régimen, es decir su ilegalidad y el clima de represión militar y policial. En esa dirección también le preguntamos al camarada Bartolo Fuentes ¿El régimen de Porfirio Lobo es de naturaleza distinta, o es la continuidad y el heredero de la dictadura? ¿Acaso el clima de represión y de asesinatos selectivos ha cesado? ¿Es el gobierno de Unidad y de reconciliación nacional fiel defensor de los intereses nacionales y del pueblo hondureño?  Son todas estas interrogantes que debemos plantearnos al momento de aseverar que el único camino para este momento es el electoral.

Es en este forcejeo de fuerzas que el régimen ha logrado introducir su política de contraofensiva económica, a saber: la no aprobación del nuevo salario mínimo, la desindexación del salario por ajuste del salario mínimo el año anterior a los docentes de primaria, secundaria y universitarios, enfermeras, médicos y otros gremios que cuentan con estatutos, aumento a las tarifas de energía eléctrica y de los combustibles.  Si obviar la aprobación de la Ley de Empleo Temporal, instrumento jurídico que deja a un lado una serie de conquistas sociales como la estabilidad laboral, el pago de cesantía y prestaciones laborales.

El STEENE  nos muestra el camino

A pesar  de la enorme necesidad de los sectores oportunistas del FNRP, de conducir a la organización en la inserción de la institucionalidad de los golpistas, algunos sindicatos y sectores que se encuentran emprendiendo luchas importantes nos muestras el camino. Recientemente el Sindicato de Trabajadores  de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STEENE) se ha enfrentado con la patronal y el régimen ilegitimo de Porfirio Lobo a través de la huelga y la movilización, para el día lunes y martes de la semana en curso todas las regionales del país se paralizaron para enfrentar el descalabro financiero que ha sometido el actual gobierno a la empresa estatal y otras anomalías.  El clientelismo político de los nacionalistas ha elevado el techo presupuestario de la empresa, es por ello que los trabajadores sindicalizados exigían la revisión de los contratos del personal supernumerario y el aumento a la base salarial. Al parecer las movilizaciones y las paralizaciones de las regionales han tenido resultados inmediatos, dado que la mayoría de las peticiones fueron asumidas por el gobierno.

Es por todo lo anterior, que el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llama a todos los gremios, sindicatos y al Frente Nacional de Resistencia Popular a retomar el camino de las movilizaciones, solo la presión social y la huelga general asegurará los verdaderos Triunfos políticos. El camino mostrado por el pueblo de Egipto debe ser retomado a modo de asegurar un mejor futuro y una sociedad que promueva los valores democráticos.

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Por Andrés Neda

“El Gobierno de la Unidad Nacional” es el slogan de campaña impulsado por el actual gobierno de Honduras y remontándonos unos meses previos a la toma del poder por parte del señor lobo, fue esta frase la que abanderó durante el inescrupuloso proceso de elecciones del 2009.

Resulta interesante observar cómo, a pesar del burdo circo electoral montado por la dictadura y los partidos políticos, las promesas hechas a la comunidad internacional sobre la construcción de un gobierno de unidad: tanto el andamiaje del golpismo, así como la presencia de actores claves en el proceso del golpe de estado, aún se mantienen inamovibles en el poder.

El gobierno del señor Lobo se ha caracterizado por impulsar un proyecto cimentado en la tónica habitual de los anteriores gobiernos a éste (incluyendo el de Zelaya) es decir: una política de medidas de ajustes, privatizaciones del sector público y un alto gasto en materia militar como parte de una medida de seguridad acrecentada desde la dictadura michelletista. Sin embargo, existen componentes nuevos en esta dinámica que son conformados por la aparición de una Secretaría de Derechos Humanos y recientemente la decisión del Congreso Nacional de modificar el artículo 5 de la actual constitución. A pesar de esta extraña contradicción entre “un poco más de lo mismo y cambios cosméticos”, todos estos procesos desarrollados por la presente administración son impulsados y dirigidos por los mismo actores que protagonizaron la crisis del 28 de junio.

Lo paradójico de todo esto es que a pesar de que una de las situaciones que preparó la antesala del golpe de estado fue precisamente la apertura a mecanismos de consulta popular; como la cuarta urna, que siendo limitada en su propuesta, resultó siendo la excusa de la acción golpista, en el presente año cuando en el poder ejecutivo, legislativo y judicial se mantienen las instancias de la conspiración del 28 de junio, parecer ser que lo que antes era malo, hoy resulta ser muy provechoso.

Tomando en cuenta lo anterior, es necesario mencionar que la subestimación que se hace del gobierno de Porfirio Lobo, por parte del FNRP y algunos sectores de la izquierda hondureña, ha resultado nociva con respecto a la caracterización de la dinámica del gobierno y la idea de vender a Lobo como un mandatario débil frente a la crisis. La situación de estancamiento actual por parte del FNRP frente a la crisis y las sistemáticas derrotas de las luchas emprendidas por gremios, sindicatos y sectores populares así como la perdida se ciertas conquistas logradas en el pasado, sólo han demostrado que el fortalecimiento del actual gobierno sigue galopando a un paso acelerado.

Resulta lamentable que mientras existe una profunda crisis hacia lo interno del FNRP por la búsqueda de escaños políticos y el control de la conducción por parte de los sectores burócratas y oportunistas, la consolidación del gobierno de Lobo y la petrificación de los sectores más reaccionarios en el poder está prácticamente consumada.

Por otro lado, la lucha por las reivindicaciones sociales, así como la apertura de espacios ampliamente democráticos es cada vez más compleja y cuesta arriba, sin tomar en cuenta el empoderamiento por parte de gobierno, de la bandera de lucha del FNRP como ser la Asamblea Nacional Constituyente. Frente a este panorama, sólo la unidad popular y la conformación de una verdadera conducción revolucionaria y un programa político que ponga en perspectiva las posibilidades de las clases populares de acceder a una democratización real a través de las herramientas de lucha del pueblo como la huelga general y la movilización permanente de las masas, podrán revertir el volátil panorama actual de la crisis en Honduras.

Hermanas y hermanos:

1. Es sabido por todas y todos que el régimen de Pepe Lobo es continuador del golpe de estado, que las instituciones y poderes del estado acogen y protegen no solo a los golpistas de ayer sino también a los de mañana, que sus instituciones son refugio de criminales, asesinos y corruptos, en esto nada ha cambiado nuestra realidad nacional desde el 28 de junio de 2009.

2. Se sabe además que los grupos de poder oligárquico, han dado un golpe de estado para quedarse y sumir en el más sombrío de los paisajes a nuestra patria: en apenas un año  derogaron “por error”  el estatuto del docente hondureño, declararon inconstitucional el decreto 18-2008, han privatizado nuestros ríos, han aprobado reformas constitucionales para ceder a poderes extranjeros nuestro territorio y soberanía nacional, han aprobado la ley anti terrorista, están cerrando hostigando y coartando la libertad de expresión comunitaria y nacional, han implementado una estrategia de seguridad basada en la represión sistemática con miembros y miembras de la resistencia nacional, mantienen la persecución contra Manuel Zelaya Rosales coordinador de F.N.R.P y otros exiliados y exiliadas. Se han destruido sindicatos, han declarado un guerra abierta contra las y los campesinos que reclaman tierra para vivir y sembrar y han eliminado de un plumazo las conquistas de protección laboral de millones de hondureñas y hondureñas.

3. Debemos de reconocer la poca oposición que desde las organizaciones populares y desde nuestro Frente Nacional de Resistencia  Popular hemos hecho a esta imposición de un régimen conservador y retrogrado similar a las peores dictaduras de nuestra historia.

4. Cabe preguntarse: ¿Por qué no hemos sido capaces de enfrentar al régimen y su barbarie?, tal vez, la respuesta es sencilla, se esta más ocupado en asegurar cuotas de poder al interior del FNRP y de imponer la lógica electoral frente a la próxima asamblea del 26 de febrero que de construir alternativas de poder popular que golpeen y hagan derrumbar al régimen.

5. La decisión de meterse de cabeza en un proceso electoral sin condiciones democráticas es para nosotros como ir a participar en el circo de los golpistas o un partido en cancha de los golpistas, con árbitro golpista y con las reglas de los golpistas, eso de entrar en un juego de esta naturaleza conlleva el peligro de arrastrar al Frente a una derrota de carácter estratégico más allá de lo calculable o imaginable.  ¿Cuál es la prisa de algunos  dirigentes de meterse en campaña política en las actuales y desfavorables condiciones?

6. Creemos que en un escenario electoral, el F.N.R.P. se presentaría dividido ya que la mayoría de los resistentes no vamos a legitimar al régimen ni ahora ni nunca, más aún, los que se desesperan por ir a la campaña política por razones más personales y de grupo que por una motivación refundacional, están igualmente divididos. ¿Qué les espera entonces a los que se embarquen en esta lucha electoral?,

7. Si estamos claros y claras que participar  en las próximas elecciones solo va a servir para blanquear el golpe de estado, para  legitimar el moribundo sistema político actual y para elevar el perfil de “demócratas” de  todos los criminales  y corruptos que forman parte de la clase política empresarial, por qué empeñarse en sacrificar las aspiraciones del pueblo en resistencia, por qué apostar a la división y  la atomización del movimiento popular en un momento en que deberíamos avanzar en ampliar las alianzas sociales, generar más conciencia de clase, ganar espacios y poder territorial, golpear al régimen desde sus debilidades,  fortalecer las estructuras locales y territoriales del Frente. Por qué empeñarse en montar una paralela al FNRP con un llamado Frente Amplio o un partido, que lo único que hará será concentrar el poder de decisión política en un grupo de iluminados electorales y utilizar a los sectores populares como “votantes”. O sea, lo mismo de siempre pero con variación de colores.

Por eso hermanas y hermanos:

8. Si el FNRP ha definido claramente sus líneas de lucha, sus objetivos y su carácter en sus asambleas de Siguatepeque y Tocoa y además, en el ejercicio de la democracia directa se obtuvieron más de  1 millón 350, mil declaraciones soberanas, que son un claro mandato para avanzar hacia la  refundación nacional, por medio de una Asamblea Nacional Constituyente Popular y Democrática, Autoconvocada.

Nos preguntamos entonces, ¿Por qué algunos miembros de la conducción del Frente no quieren darle cumplimiento a las declaraciones soberanas?

Proponemos:

1- Que los puntos a abordar en la asamblea sean el acordar mecanismos para impulsar la constituyente para la refundación de Honduras a partir del mandato de las declaraciones soberanas,

2- Además un plan de lucha para el retorno de los exiliados y exiliadas incluyendo al  presidente de la república Manuel Zelaya Rosales,

3- Así mismo, acciones que nos permitan acorralar y hacer colapsar este oprobioso régimen que nos oprime  aprovechando la creatividad y experiencia popular en cada territorio, región o departamento,

4- Aprovechar la asamblea para tomar decisiones que sirvan para fortalecer el FNRP en el sentido  de iniciar un proceso democratizador interno y que sea un ejemplo de la sociedad a la que aspiramos todas y todos, reconociendo el derecho a la revocación de mandatos, la elección por la asamblea de todas y todos los coordinadores de las comisiones que integren el Frente (política, comunicación,  formación, internacional, etc.) basado en los principios de inclusión, transparencia,  diversidad y pluriculturalidad.

5- Comisionar un plan que nos permita articular el proyecto refundacional del país a partir de la construcción del poder popular desde abajo, por  sociedad  justa,  humana, incluyente y emancipada donde participen todos las organizaciones y colectivos y delegados y delgadas  del país. Una gran consulta y debate nacional.

Finalmente:

Hermanas y hermanos:

No permitamos  que el oportunismo y los intereses personales y de grupos dividan al Frente, no permitamos que esta Asamblea del 26 de febrero se convierta en una derrota para el pueblo en resistencia.

Nuestro deseo es que esta Asamblea sea un triunfo de la unidad como lo señaló Manuel Zelaya,  avancemos entonces en fortalecer al FNRP para la refundación nacional, desde abajo, desmontando los múltiples formas de dominación: capitalismo, patriarcado y racismo.

Las elecciones pueden ser una forma de lucha pero en condiciones favorables para el pueblo; en condiciones de dictadura la prioridad es derrocar la dictadura.

La Esperanza Intibucá 8 de febrero del 2,011.

CONSEJO CÍVICO DE ORGANIZACIONES POPULARES E INDÍGENAS DE HONDURAS COPINH

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EL DESARROLLO HISTÓRICO DE  LOS MOVIMIENTOS POLÍTICOS Y SOCIALES, SIEMPRE SE HA SUSTENTADO EN PROCESOS DIALÉCTICOS DE CONFRONTACIÓN Y NEGOCIACIÓN.  LA HISTORIA  DEMUESTRA QUE CUANDO LOS PROCESOS DE CONFRONTACIÓN  SE HAN LLEVADO HASTA EL LÍMITE CRÍTICO, ESOS MOVIMIENTOS  OBTUVIERON  LAS MEJORES SOLUCIONES NEGOCIADAS.

Basados en esta realidad histórica el STIBYS plantea y propone lo siguiente:

1. Es preocupante que apenas a un año y medio del golpe de Estado militar, sin haber llegado la confrontación con los golpistas a un límite crítico y sin un desgate del régimen que los obligue a buscar soluciones negociadas a la crisis política, se estén promoviendo  Frentes amplios paralelos para participar en las elecciones del 2013, argumentando que en  ellas el pueblo va a derrotar a los golpistas, se sacará el clavo y desde el poder,  convocará  a la Constituyente.

2. Aprobar  en la Asamblea Nacional del FNRP del 26 de febrero la participación  en las elecciones del 2013 sería el mejor regalo para los golpistas y  un flaco servicio  para el imperio gringo, quienes  acostumbran promover guerras, invasiones y golpes de Estado para luego pedir a los pueblos víctimas olvidarse del pasado, la  reconciliación nacional y hacer borrón y cuenta nueva con los crímenes que contra ellos se han cometido. Esto es lo que están haciendo con nosotros y que los golpistas del patio también promueven. Otra consecuencia de una decisión de tal naturaleza es dejar a los países que no han reconocido al régimen golpista en una situación complicada que los obligaría al reconocimiento.

3. El FNRP es amplio, diverso y lo más nuevo que tenemos. No volvamos al pasado.  No dividamos al Frente ni separemos lo social de lo político. Recordemos que Carlos Marx nos enseñaba la importancia de la unidad y que “toda lucha social es política y que toda lucha política es social”. Con la creación de frentes amplios paralelos dividimos al Frente y separamos lo social de lo político. De nuestra inteligencia para evitarlo  dependerá el futuro de nuestro país y su refundación.

4. El imperio gringo y sus súbditos en Honduras decidieron que a pesar del golpe de Estado militar debíamos restablecer el orden Constitucional y lavar el golpe, asistiendo  a unas elecciones que todos sabemos fueron ilegítimas, infladas  y fraudulentas. Nosotros, como movimiento popular, desde que se aprobó el TLC con los Estados Unidos planteamos la necesidad de una Constituyente para elaborar una nueva Constitución, reafirmar nuestra soberanía y garantizar los intereses nacionales. Esta necesidad  encuentra su máxima justificación ahora al haberse roto el orden constitucional con el golpe  de Estado militar. En este marco, hablar de ir a elecciones, no solo es desaprovechar la situación creada, sino justificar y darle continuidad a la estrategia impuesta por el imperio y sus repetidores golpistas nacionales.

5. Se argumenta, erróneamente, que Evo Morales,  Rafael Correa y Hugo Chávez llegaron a gobernar por la vía electoral y convocaron a una Constituyente desde el poder, pero se olvida que lo hicieron en el marco de  regímenes constitucionales, que no es el caso de Honduras, en donde ese orden constitucional está roto. A su ascenso contribuyó una profunda crisis, tremendas confrontaciones y regímenes cuestionados por sus pueblos.  Los tres llevaron como compromiso la convocatoria a Asambleas Nacionales Constituyentes para hacer nuevas constituciones y refundar sus países.

6. En Honduras la oligarquía ha sostenido y sigue sosteniendo la inviabilidad constitucional de una Asamblea Nacional Constituyente y el pretexto para derrocar al Presidente Zelaya Rosales fue su intento de consultar al pueblo sobre su convocatoria. La tesis  de ganar el gobierno y las dos terceras partes del Congreso en las próximas elecciones del 2013,  para desde ahí  convocarla,  tendrá la misma respuesta oligárquica de la inviabilidad constitucional  con el agravante que de no lograrse un triunfo en los niveles esperados, habremos legitimado el régimen y retornado al pasado.

7. El STIBYS considera, igual como lo afirma el presidente Zelaya en una de sus cartas, “que este no es un momento para pensar en elecciones” y que “sería un terrible error pensar que estamos listos para abordar ese camino de inmediato”. También afirmó en otra de sus cartas que elecciones, solo para la constituyente. Creemos, igual que él, que debe abrirse el debate sobre las vías posibles sin excluir ninguna y que es deber del FNRP proponerlas y estimular la discusión amplia, sin inducciones que conduzcan a una en particular porque la selección de la o las vías deben ser aquellas que mejor se adapten a las condiciones reales de triunfo. Las contradicciones existentes, propias de la diversidad del FNRP, deben tener como decía José Martí, soluciones ideológicas con profundo debate.

Soluciones Ideológicas, porque estamos en un proceso de agudización de la lucha de clases en donde el imperialismo al imponernos el neoliberalismo y un  golpe de Estado militar ha generado principalmente dos efectos perversos en nuestra destruida institucionalidad: uno, que el poder está fuera del Estado y dos, es que el pueblo está excluido del poder. Para superar estos dos  efectos  que niegan al pueblo hondureño su soberania, la única salida es la refundación del país. Además, la conducción del Frente  por la  definición y  características de ésta organización está obligada a elevar el nivel ideológico y de conciencia de clase del movimiento nacional de resistencia y no a provocar su estancamiento o retroceso.

Soluciones con profundo debate, porque no se trata de inducir opciones sino de  encontrar soluciones adecuadas, reales y honestas; no de garantizar el triunfo de   nuestras posiciones, sino de construirlas conjuntamente. Solo si el debate viene desde la base y es ideológico y profundo saldremos de esta Asamblea unidos y fortalecidos en la diversidad.

8. Una pregunta obligada es: ¿si el poder está fuera del Estado y el pueblo excluido del poder, qué poder ganaremos con las elecciones del 2013 que nos va  permitir convocar  a la Constituyente y refundar el país? El Presidente Zelaya en su gobierno comprobó que el poder estaba fuera del Estado, que le impedían gobernar y esa situación no solo no ha cambiado sino que ahora es más grave y vergonzosa. Véase la práctica del régimen actual,  las publicaciones de WikiLeaks  y la posición de Porfirio Lobo que dice estar en el centro y que la ultra izquierda y la ultra derecha le impiden gobernar.

PROPUESTA

Por ello desde el STIBYS sugerimos, en el marco de los posicionamientos políticos del FNRP de Siguatepeque y Tocoa, de la coyuntura política actual, de los avances que ha tenido el FNRP y el pueblo hondureño en general, lo siguiente:

1. Continuar aplicando el  numeral 1 del Posicionamiento Político del FNRP de enfrentar o confrontar el actual régimen político con acciones permanentes de resistencia con el fin de  evitar - desde la lucha popular organizada, movilizada y politizada a nivel barrial,  aldeal, municipal, departamental y de las organizaciones sociales y políticas - la implementación de leyes, decretos, fallos, ordenanzas y cualquier otro atentado contra los derechos económicos, políticos, sociales, culturales, de justicia, de soberanía popular, territorial y alimentaria conquistados a través de la lucha por el pueblo en general. Así mismo seguir luchando por desmontar el aparato golpista, la corrupción, la impunidad, la violación a los derechos humanos y por el retorno seguro y sin condiciones del Presidente Zelaya y todos los exiliados.

2. Continuar con los procesos de formación, organización y movilización para mejorar los niveles de lucha y la calidad de la confrontación hasta imponer a los golpistas, desde el pueblo, las  soluciones más adecuadas a la crisis.

3. Ejecutar el mandato de más de un millón trescientos mil hondureños de auto convocarnos a la Asamblea Nacional Constituyente originaria, popular, incluyente y refundacional, que elabore una nueva constitución producto de un pacto social y político, integrada con interlocutores válidos, que representen   todos los sectores sociales, económicos y políticos junto a delegados departamentales y municipales para refrendar su legitimidad. El compromiso de esta Asamblea podría ser el instalar la Constituyente el 28 de junio de 2011.

RECORDEMOS QUE LA LEGITIMIDAD DA EL PODER Y NO A LA INVERSA. Por ello, instalar la Constituyente para obtener una Nueva Constitución Legítima, es un esfuerzo de confrontación, que organizará, elevará la conciencia del pueblo, ayudará a agudizar la crisis y obligará a los golpistas, junto con otros actos de resistencia, a buscar salidas negociadas.

4. Luchar por una nueva Ley Electoral ajustada a la nueva Constitución,  que permita la participación electoral, no solo a los partidos políticos y a las candidaturas independientes, sino a frentes sociales y políticos, lo cual sería un nuevo aporte en la democratización de los procesos electorales.

5. Debemos desde ya rechazar y hacer resistencia al proceso electoral del 2013, porque no hacerlo, o promoverlo con los frentes amplios electorales, significa seguir oxigenando el golpe de Estado militar. Crear esperanza a ese respecto, tiene el efecto de hacernos olvidar todo lo pasado, hacer borrón y cuenta nueva con el golpe de Estado y sus consecuencias.

Aclaramos que el hecho de rechazar y hacer resistencia al llamado proceso electoral del 2013, no indica que estamos en contra de los procesos electorales como una vía legitima de acceso al poder. Tampoco el hecho de que el FNRP haya rechazado el monólogo y las misas en cuartos oscuros, propuestas por  Porfirio Lobo, significa que nos opongamos al diálogo y la negociación, las que se justifican cuando los interlocutores son válidos y las  condiciones permitan avanzar en el logro de nuestros objetivos.

6. El FNRP puede buscar, con interlocutores válidos, salidas a la crisis política, pero sin abandonar la vía de la ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE con las características que hemos señalado y los  objetivos perseguidos. Esto, solo podría   lograrse con una correlación de fuerzas favorables y cuando la confrontación con los golpistas y el imperio, haya llegado a su límite crítico, lo que podría involucrar en su momento a las Naciones Unidas,  la OEA  y los países de UNASUR en el marco de las resoluciones de esas instancias internacionales sobre el golpe de Estado en Honduras y las atribuciones de sus Cartas Constitutivas.

En conclusión, estos procesos dialécticos de confrontación y negociación desde la base, al contrario de las elecciones del 2013 que son otra trampa, nos darán legitimidad  y contribuirán a convertir al FNRP en una verdadera opción de poder popular. Esta estrategia y las tácticas de lucha pueden  ser modificadas cuando se considere necesario y la Asamblea Nacional del FNRP del próximo año, estará obligada no solo a revisarlas  y evaluar lo actuado, sino a ratificarlas o modificarlas.

El STIBYS plantea la necesidad de – antes, durante y después de  la Asamblea del 26 de febrero – buscar consensos pues ella no es el principio ni el fin, es parte de un proceso.  De esa Asamblea debemos salir unidos y fortalecidos en la diversidad, porque es ahora o nunca como decía el ex presidente del STIBYS Luis Alonzo Morel Coello.

Tegucigalpa, Honduras, Febrero 2011


JUNTA DIRECTIVA CENTRAL STIBYS

asamblea 30 enero fm

Por Estrella Raudales y Angeles Billon

¿Cuál debe ser la prioridad de la Resistencia en esta coyuntura? Luchar en las calles contra el alza de la canasta básica y los combustibles, la falta de medicamentos en los hospitales, el desempleo, la miseria, el hambre y desnutrición, la instalación de pequeñas ciudades neo-colonialistas empresariales, la privatización de la educación, luchar contra la corrupción y la impunidad en la Corte Suprema de Justicia y Ministerio Público, entre otros, debería de ser el  eje de nuestra acción primordial en estos momentos.

No es adecuado priorizar la lucha en el terreno electoral dentro de las instituciones que controlan los golpistas, sobre todo cuando existen necesidades más trascendentales para el movimiento de masas. La dirigencia del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) debería de implementar como medida política la clarificación política y la concientización dentro de sus bases, para poder conocer cuando se nos está engañando a través de campañas mediáticas orquestadas dirigidas por la oligarquía y la burguesía nacional.

Maniobras antidemocráticas

En la Asamblea municipal de la ciudad de Tegucigalpa realizada el 31 de enero del presente año, se manifestó la falta de organización interna pero sobre todo evidenció la maniobra política de la dirección del FNRP para imponer a sus candidatos y desacreditar a la oposición interna que lucha contra la línea política conciliadora que representa el ala oportunista que encabezan Juan Barahona, Gilberto Rios, Renán Valdez  y otros miembros de la Comisión Política del FNRP.

Es de hacer notar que las características y los vicios de la forma de hacer política  de los partidos tradicionales quedaron plasmados en dicha asamblea municipal donde los que votaban eran las clasicas “barras” o activistas de las organizaciones que acreditaron previamente en la asamblea, bajo su conveniencia. Cabe mencionar, que dicha votación estuvo cargada de vicios de nulidad por la forma poco legítima en que se realizó, dando poca o ninguna oportunidad a los delegados propietarios de todas las organizaciones y patronatos de barrios y colonias que no estaban de acuerdo con este procedimiento de elección.

Ante esa situación, los dirigentes dieron por terminada su asistencia al evento, retirándose de la reunión, haciendo comentarios poco favorables, como el hecho de criticar un gobierno dictatorial y hacer exactamente lo mismo, al no dar oportunidad de participación democrática a las organizaciones que estuvieron en pie de lucha contra el golpe de Estado y el gobierno continuista de Porfirio Lobo Sosa.

Detener el giro oportunista

Lejos de abogar por la democratización del FNRP, de su fortalecimiento en los distintos procesos de lucha, de cara a la asamblea nacional del 26 de Febrero,  debemos criticar al ala oportunista dentro del FNRP que intenta imponer de la forma más sucia su intención de conducir al Frente al próximo proceso electoral. Para este momento, parte de la preocupación del Frente debe ser defender las conquistas sociales, como el derecho al trabajo, derecho de sindicalización, derecho a la tenencia de la tierra y la libertad de prensa entre otras. Es importante conducir a la resistencia en la lucha para la obtención de una mejor calidad de vida porque los recursos que influyen para ello son nuestros y no de clases dominantes que aliados con las fuerzas represivas nos han venido a robar y saquear nuestras vidas.

Es por todo lo anterior, que el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llama a las distintas organizaciones de izquierda, gremiales, sindicales, estudiantiles y populares a la más amplia unidad de acción para detener el giro que dio la dirección al imponer su agenda intentando participar en el terreno electoral, que solo beneficiará a los golpistas.

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