propuestas de seguridad

Por Armando Tezucún

Este año Guatemala sufrió reiterados fenómenos naturales que causaron cuantiosos daños. Empezando por la erupción del volcán de Pacaya y las tormentas Agatha y Alex, que preludiaron un copioso invierno, la naturaleza se conjugó con una estructura socio económica injusta que pone en situación precaria a un numeroso segmento de la población, y con obras de infraestructura mal construidas por empresas más interesadas en sus ganancias que en el bienestar de los usuarios (léase la entrevista al ingeniero Gustavo Cosenza, diario El Periódico 7/11/10, “Que los puentes colapsen cada 5 años es rentable en Guatemala”). El resultado fue un número considerable de muertos, una enorme cantidad de viviendas dañadas, puentes y carreteras inutilizados y grandes extensiones de cultivos destruidas.

Según el gobierno, la cantidad necesaria para reconstruir lo destruido y recuperar lo dañado asciende a  Q 15 mil millones (cerca de US$ 1,900.00). Parte de esta cantidad se considera cubierta por una ampliación presupuestaria, donaciones de países amigos y una posible emisión de bonos; esto reduce la cantidad a Q 11,900 millones (alrededor de US$ 1,500.00) (declaraciones de Karin Slowing, secretaria de Planificación y Programación de la Presidencia al diario Prensa Libre, 11/10/2010).

En vista de la lenta recuperación de los ingresos fiscales y la ausencia de fondos de emergencia, el gobierno  decidió convocar a países amigos, agencias donantes, organismos internacionales y redes humanitarias a una Conferencia Internacional de Cooperantes para la Reconstrucción con Transparencia, que se realizó el 11 y 12 de octubre recién pasados.

Al llamado acudieron unos 150 representantes de organismos como la Comisión Económica para América Latina, el Banco Centroamericano de Integración Económica, el Banco Internacional de Desarrollo, el Banco Mundial, la Organización de Estados Americanos, diferentes agencias de Naciones Unidas, delegados de países amigos como España, Italia, Noruega, Israel, Cuba, México, Argentina, Japón y Taiwán y de agencias como Cruz Roja Internacional, Save the Children y Catholic Relief Services.

La intención del gobierno la expresó el canciller Haroldo Rodas en su discurso ante los asistentes “Necesitamos del apoyo de todos ustedes, hermanos del mundo; necesitamos de cooperación no reembolsable, cooperación técnica, y esperamos que ustedes nos brinden ese apoyo” (Prensa Libre, 12/10/10), y el presidente Colom expresó “Espero que los resultados de esta conferencia sean el apoyo y respaldo de la comunidad internacional a los esfuerzos de la sociedad guatemalteca para implementar una reconstrucción con transformación”(Prensa Libre 12/10/10).

El apoyo de los donantes y sus recomendaciones

Al final de la conferencia, los asistentes prometieron ayuda en forma de préstamos, donaciones y cooperación técnica por US$ 590 millones (unos Q 4,762.2 millones, el 40% del monto necesario para la reconstrucción). Sin embargo, los representantes de instituciones y países amigos coincidieron en que Guatemala debe también hacer un esfuerzo por encontrar recursos para suplir lo que falta para cubrir los gastos de la reconstrucción. En especial hicieron énfasis en incrementar los ingresos del Estado por medio un nuevo pacto fiscal. Bien sabemos que las clases dominantes guatemaltecas tradicionalmente han sido reacias a contribuir con impuestos para el desarrollo del país. El gasto público de Guatemala es de un 4.5% del producto interno bruto, cuando el promedio en América Latina es del 16%. Con una recaudación tributaria tan baja como la de Guatemala es imposible superar el estado desastroso del sistema público de salud, educación, vivienda y servicios básicos para la población.

Gilda Montiel, del Banco Interamericano de Desarrollo dijo “Para reconstruir el país se necesita una alianza entre los sectores nacionales para hacer posible su financiamiento, para lograr el espacio fiscal necesario y fortalecer la capacidad de ejecución necesaria para implementar el plan” (Prensa Libre 12/10/10). Por su parte, Alicia Bárcena, subsecretaria general de la ONU señaló “…el pacto fiscal es esencial porque requiere esa mirada creativa de decir en qué sectores podemos tributar más y mejor, cómo podríamos revisar  esa estructura fiscal, para que sea progresiva, y cómo se revisan las exenciones fiscales para que no sean tan generalizadas” (Prensa Libre 12/10/10). Mainardo Bernadelli, embajador italiano expresó “Hay necesidad de hacer un nuevo pacto de país, que incluya un compromiso tributario, fiscal (…), pero también un pacto político, de Estado, que ponga fin a todas estas polémicas internas, de polarización política y enfrentamiento cotidiano” (Prensa Libre 13/10/10).

Las agencias del imperialismo y sus gobiernos están en la línea de complementar las medidas neoliberales con Estados capaces de invertir en programas asistenciales que promuevan el consumo masivo y obras de infraestructura que faciliten la inversión privada. Por ello Alicia Bárcena puso en sus declaraciones como modelo el caso de Brasil bajo el gobierno del PT.

Pero en Guatemala tenemos una oligarquía y burguesía tradicionales que se resisten a pagar impuestos y que mantienen un conflicto con el actual gobierno, que representa a sectores empresariales emergentes, que luchan por hacerse un espacio en los negocios del Estado y en diferentes ramas de la economía. Por ello han fracasado tres intentos del gobierno por hacer reformas en la tributación e introducir nuevos impuestos, teniendo que recurrir al endeudamiento interno y externo para financiar su presupuesto.

El gobierno propone un nuevo diálogo

Animado por las declaraciones de los donantes, el presidente Colom decidió convocar a un nuevo diálogo con el empresariado en la primera quincena de noviembre, anunciando la discusión de un impuesto de seguridad para el sector privado. El secretario de Comunicación Social de la Presidencia, Ronaldo Robles declaró que “El gobierno propondrá esa discusión, tomándoles la palabra a los empresarios, que reunidos en el reciente Encuentro Nacional de Empresarios hablaron de ese tipo de impuesto como uno de los ejemplos mencionados por Álvaro Uribe, ex presidente de Colombia” (Prensa Libre 13/10/10). El gobierno propuso como mediador del diálogo precisamente a Uribe, quien a raíz de su intervención en el reciente Enade es al parecer es el héroe del día en los círculos empresariales y gubernamentales.

Durante la conferencia de cooperantes, el ministro de finanzas Édgar Balsells anunció la creación de un impuesto único para la reconstrucción, que pagarían los trabajadores con ingresos mensuales por encima de Q 3 mil. Este bono sería pagado también por las empresas, aunque el funcionario no especificó cómo. La propuesta es que los trabajadores que ganen mensualmente de Q3 mil a Q 5 mil tributen Q 200 y los que ganen por encima de Q 5 mil mensuales paguen Q 500. Por medio de este impuesto se recaudarían Q 170 millones.

Antes de que aumentara la avalancha de críticas generadas por el anuncio de Balsells, el presidente Colom corrigió al ministro diciendo que la propuesta de impuesto es para aquellos que ganan más de Q 8 mil, “La propuesta es para el que gane más de Q 8 mil. Si no estoy mal, son cinco salarios mínimos. Pero hay otras propuestas, como la de subir un punto porcentual para el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y uno para el Impuesto de Solidaridad (ISO), y otras, por eso llamé al diálogo en noviembre” (Prensa Libre 14/10/10). Sin embargo, dos días después Colom desechó la idea del pago de un tributo único por parte de los asalariados. “Será borrón y cuenta nueva. En la reforma que planteamos se incluirá evasión fiscal, calidad de gasto, readecuación de préstamos, etc.” (Prensa Libre 16/10/10). No cabe duda de que este gobierno tiene una sorprendente capacidad improvisación y de contradicción que evidencia falta de planificación y ausencia de rumbo.

La burguesía adelanta propuestas

Anticipándose al diálogo, la burguesía, a través de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG), presentó, en una carta abierta que luego fue entregada en la presidencia el 2 de noviembre, una serie de propuestas no sobre el tema fiscal, sino sobre seguridad.

Es notorio que el empresariado aglutinado en el CACIF (Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras) en los últimos meses ha tenido una actitud cada vez más beligerante, pronunciándose sobre cada aspecto del quehacer político e institucional, haciendo propuestas y exigencias al gobierno. Estamos en un año preelectoral y los partidos políticos, en especial los de la oposición de extrema derecha están haciendo campaña anticipada de forma velada. Creemos que el CACIF está formando parte de esta campaña anticipada en contubernio con la extrema derecha, interviniendo cada vez más agresivamente en el cuestionamiento al gobierno.

La propuesta de seguridad que presentó la CIG es muy similar al planteamiento básicamente represivo de la extrema derecha en el tema: Declaración de estado de excepción en las zonas rojas, retomar el control de las cárceles, sacar a las calles fuerzas combinadas del ejército y la policía, crear “Pelotones de Reacción Inmediata”, instalación de cámaras de seguridad, etc.

En otro orden de cosas, el presidente del CACIF, Carlos Amador dio declaraciones reclamando que la comisión encargada de planificar la reconstrucción de las áreas dañadas por los desastres naturales, en la que participa el empresariado, no ha funcionado. Igualmente hizo ver que el empresariado aún no recibe invitación para el diálogo sobre reforma fiscal (Diario La Hora 2/11/10). A través de su secretario de comunicación, la Presidencia de la República ofrece una y otra explicación del retraso. Hasta ahora el único indicio de qué está pensando el gobierno en materia fiscal la dio el vicepresidente Rafael Espada al explicar que se está contemplando la creación de un impuesto de seguridad al patrimonio, similar al que aplicó Álvaro Uribe en Colombia durante su mandato.

¿Hacia otro diálogo fracasado?

Todos los proyectos de reforma tributaria e implementación de nuevos impuestos que ha planteado el gobierno de Álvaro Colom han fracasado por la oposición férrea de sector oligárquico y tradicional de la burguesía. Nada indica que esta vez será diferente. Ni siquiera las sugerencias de las agencias internacionales harán cambiar la actitud del empresariado más reaccionario.

A este gobierno le queda un año y dos meses de ejercicio. El próximo año será sumamente conflictivo por el proceso electoral que se avecina. Creemos que los capitalistas del CACIF estarán más interesados en impulsar una candidatura acorde con sus intereses que dialogar con un gobierno que no los ha representado y con el que han estado numerosas veces en desacuerdo. La primer encuesta de intención de voto publicada le da la ventaja al general Otto Pérez Molina, del derechista Partido Patriota (35.5%); le sigue a considerable distancia Nineth Montenegro con un 9.6% (Diario El Periódico 7/11/2010). Si no apoya a Pérez Molina, la burguesía buscará su candidato, pero pesamos que ésta será su prioridad, no la búsqueda de consensos con un gobierno y un proyecto político que, según todos los indicios, no ganará otro período.

Enade 2010

Por Leonardo Ixim

Recientemente ha finalizado en Encuentro Nacional de Empresarios (ENADE) evento anual que desde 2003 organiza la burguesía guatemalteca por medio de la Fundación Nacional para el Desarrollo (Fundesa). En esta ocasión tuvieron la presencia de personalidades de la derecha continental como el expresidente de Colombia Álvaro Uribe, señalada de crímenes de lesa humanidad contra el pueblo de ese país.

En una entrevista hecha a Juan Carlos Zapata director ejecutivo de Fundesa por el matutino Siglo XXI, llegan a la genial conclusión de que en Guatemala hay pobreza y  comenta el ejecutivo que llegaron a eso después de estudiar los informes del Banco Mundial y las metas trazadas en los objetivos del milenio, que Guatemala está muy lejos de cumplir. Sin duda la oligarquía atrasada de este país se da cuenta de que para ser competitivos a nivel internacional y no ser tragados totalmente por la burguesía mundial necesita reducir los niveles de pobreza en la población guatemalteca, pobreza  que ellos mismos han ocasionado.

El empresariado propone reducir el porcentaje de guatemaltecos en pobreza de 51 % en la actualidad a 35 % para el 2021, con un crecimiento del 8% anual que desde ya pomposamente plantean para ese año en que se conmemora el bicentenario de la independencia de Centroamérica. Esta cifra ni siquiera llega a lo planteado en los objetivos del milenio que tienen el año 2015 como fecha para cumplirse.

Estos cálculos lo basan en el Programa Nacional de Competitividad (Pronacom) que es una estrategia de la burguesía local acompañada por los dos últimos gobiernos, de  Berger y Colom. Esto es, la hoja de ruta para ubicarse en mejor lugar en el mercado internacional reposicionándose como socios menores para las empresas transnacionales que traigan capital, específicamente en explotación de recursos naturales,  prestación de servicios como los Call Center y servicios públicos como la comercialización de agua acarreando la privatización de ésta. De hecho, en base a lo acordado en dicho encuentro, le apuestan a la inversión en tales servicios, junto a la mejora de la calidad de la escasa producción de manufacturas que se reduce en su mayoría a bienes ligeros, alimenticios y agro industriales.

Según la propuesta de ese encuentro se plantea varios ejes para reducir la pobreza que como mencionan no sólo es una estrategia para la reducción de este flagelo sino una condición necesaria para  la acumulación de capital de parte de los empresarios. Estos son: Inversión social de calidad, infraestructura de calidad, impulso a la pequeña y mediana empresa, inversión y empleos en sectores de calidad mundial.

La inversión social de calidad lo que nos propone es mejorar la cobertura y la calidad educativa que si bien es una meta correcta, la idea es formar capacidades para ser mano de obra eficiente. Eso por un lado, por otro lado en el plano de salud se busca reducir los niveles de desnutrición en niños menores de cinco años por las repercusiones que esto tienen en la capacidad productiva de los individuos.

Infraestructura de calidad. Aquí se muestran preocupados por la deficiencia en esta materia, pues le significa no tener las condiciones adecuadas para generar una conectividad interna necesaria en el movimiento de bienes y servicios. Aquí descaradamente plantea la falta de recursos del Estado para invertir en infraestructura ya que en ninguno de sus documentos mencionan la necesidad de tributar más. Se agarran de la recién aprobada Ley de Alianzas Público-Privada que es otro regalo más del Estado a la burguesía, pues tal como mencionan en su propuesta, la burguesía invertirá en estos proyectos logrando grandes beneficios.

La generación de empleos en sectores de calidad mundial se refiere como mencionamos arriba a la inversión en sectores que privilegia el Pronacom, pero no mencionan en su estrategia de acción, a pesar de comentarlo en su marco teórico como una causa de pobreza, el aumento de los ingresos salariales de los trabajadores.            El otro eje es el apoyo a la PYME. Ahí retoman los condiciones para la acumulación de capital, inversión privada de infraestructura y de mejoramiento de las condiciones de vida (salud y educación), además de invertir -aunque no plantea quiénes- en centros de transferencia de tecnología e información en mercados, ya que señala las carencias de las PYMES en estos rubros. Busca convertirlas en socios menores de la gran empresa como proveedores; sin embargo lo que no mencionan es el poco interés de la banca privada para dar crédito a este sector, no hay ninguna propuesta de banca estatal para el desarrollo, lo que por supuesto no es de su interés.

No existe, como se mencionó anteriormente, una propuesta de mayor tributación por parte de este sector, simplemente menciona el mejoramiento de la calidad del gasto, aumentar la base tributaria al sector informal como la mayoría de PYMES y se deja veladamente la propuesta de aumentar el IVA, es decir un impuesto al consumo que afecta sobre todo a la población trabajadora, y todo esto tarea del Estado,  hacia ellos nada.

Por ultimo mencionamos que entre sus creaciones recientes la oligarquía forma un Consejo Económico Social con la participación de connotados intelectuales de historial izquierdista como Gustavo Porras, la participación de cooperativistas, federaciones de pequeños empresarios, sindicatos como la UASP y la dirigencia del magisterio y organizaciones campesinas. Este intento de cooptación cambia la estrategia de confrontación de la burguesía por la de ser hegemonía en la sociedad civil, algo aceptado ya por  algunos organismos de derechos humanos.

Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) consideramos esta preocupación de reducción de pobreza como otra  forma de seguir explotando al pueblo trabajador pues sigue con las mismas tácticas neoliberales, no hay ni siquiera una pizca de propuesta de crear un capital nacional, un mercado centroamericano,  una industria nacional y regional sostenible ambientalmente, pues la oligarquía es incapaz por su dependencia al imperialismo. Eso sólo lo puede hacer la  clase obrera, campesina, comunidades indígenas y sectores medios.

Por Leonardo Ixim

Los efectos de las dos tomas llevadas a cabo heroicamente por los Estudiantes Por la Autonomía (EPA) en este año se hacen sentir en el estudiantado sancarlista, independientemente de los resultados de los acuerdos a que se llegó entre EPA y el Consejo Superior Universitario (CSU), con sus limitantes y avances, e independiente de la composición de clase de la dirigencia de EPA y su orígenes políticos e ideológicos.

La pita se rompió por el lado más crítico y desigual dentro de la estructura de gobierno de la Universidad de San Carlos (USAC), es decir por las escuelas no facultativas en su mayoría de ciencias sociales y arte, en donde se difunde el pensamiento crítico al sistema y libre expresión artística.

La mayoría de escuelas y los sectores que las conforman tienen una tradición de lucha, sin desconocer la lucha de las facultades. De hecho nacieron en el contexto de crisis político-social a fines de los 70s donde se cuestionó el régimen político dictatorial y el sistema económico oligárquico. Así las escuelas son producto del proceso de ruptura político-académico con facultades. Esto se da porque se buscaba la profesionalización de las disciplinas científicas que se imparten ahí  y tener un accionar político más autónomo y crítico que el que tenían dentro de las estructuras facultativas.

Cuando fue hecha la ley orgánica de la USAC en 1947, en el gobierno revolucionario de Juan José Arévalo que otorga entre varias medidas democráticas la autonomía universitaria, no se consideró a las escuelas no facultativas, pues no existan. Pero a raíz de la coyuntura de fines de los 70s, cuando surgieron las escuelas, dicha ley no se actualizó, ya que siempre existió en el Congreso de la República un contexto marcado por el predominio de partidos de derecha enemigos del quehacer científico y político de la USAC.

Así tenemos que la Escuela de Historia y de Comunicación son ruptura con la Facultad de Humanidades, la de Ciencias Políticas con la de derecho, la de Trabajo Social es una incorporación a la U pues era parte del Instituto Guatemalteco del Seguro Social y la de más reciente creación es la Escuela Superior de Arte, también por la necesidad de profesionalizar la formación artística en el país. Situación similar tienen los Centros Regionales fundados en la década de los 80s como una necesidad de priorizar la formación profesional en el interior del país. Un caso singular de esto es el Centro Regional de Occidente (Cunoc) que tiene sede en la ciudad de Xela. Dicho centro cuenta con 10 mil estudiantes, aún más que muchas facultades.

Pero la realidad es que tanto escuelas no facultativas como centros regionales no participan en la estructura de gobierno de la universidad, tienen un presupuesto mucho menor que las facultades, la negociación de éste es de carácter político independientemente de las necesidad reales de las facultades, pues se le otorga más a las que tienen más peso político y presencia dentro del CSU, dominadas hoy por la derecha. Los estudiantes de escuelas y centros regionales son de segunda categoría, sin derechos políticos para votar por rector, solamente los docentes y profesionales de las escuelas votan como miembros de colegios que son ajenos a su profesión.

Con vemos, la prioridad son las facultades que forman en disciplinas técnicas y científicas en su carácter tradicional, funcionales a la lógica de acumulación de la burguesía, no ciencias sociales y artes que tienden a la crítica de la acumulación capitalista

Una particularidad interesante ha sido que estudiantes de escuelas y centros regionales, tras las tomas de EPA, han sido los que más conciencia han tomado y han visto la importancia de organizarse en asambleas permanentes de estudiantes con la finalidad de ser un actor de relevancia en este proceso de reforma de cara a combatir las políticas neoliberales y las exclusiones de la U.

Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) exigimos la inclusión de las asambleas permanentes a la mesa multisectorial que propondrá una metodología para el congreso de reforma, pues ha sido un sector no tomado en cuenta históricamente que está demostrando su inconformidad, así también hacemos el llamado al estudiante apático a tomar conciencia e incorporarse a esta histórica lucha.

20 de octubre

Este día conmemoramos el aniversario de la revolución de octubre de 1944. El 20 octubre de ese año se abrió un proceso de revolución democrática que, durante diez años, transformó Guatemala, abriendo a la amplia mayoría del pueblo la posibilidad de tener derechos básicos de expresión, organización, seguridad social, garantías laborales y libertades generales. Estas amplias libertades permitieron la conformación de un movimiento campesino, obrero y popular que por primera vez hizo escuchar su voz y exigió sus derechos.

Durante el segundo gobierno de la revolución, del presidente Arbenz, el movimiento popular cobró aún más fuerza, impulsado por la reforma agraria que expropió las tierras ociosas de la oligarquía y de la compañía bananera estadounidense. Fue el temor de la burguesía y el imperialismo a este pujante movimiento campesino, obrero y popular el que hizo que se fraguara una campaña contrarrevolucionaria dentro y fuera del país contra el gobierno de Arbenz, que con el auspicio de Estados Unidos terminó derrocándolo en junio de 1954.

La lección que debemos extraer de estos acontecimientos es que los obreros, campesinos y explotados deben a toda costa mantener su independencia de clase no confiar ni en los políticos y partidos burgueses ni en las instituciones del Estado burgués, como el ejército que traicionó a Arbenz, sino confiar sólo en sus propias fuerzas y organizaciones de clase.

Una de las conquistas de estos diez años de democracia fue la proclamación de la autonomía de la Universidad de San Carlos de Guatemala en 1945, durante el gobierno de Juan José Arévalo. Recientemente estudiantes de la USAC organizados en EPA (Estudiantes por la Autonomía) y en otras agrupaciones, desarrollaron una lucha valerosa en defensa de la autonomía, que había sido violada por la Corte de Constitucionalidad al entrometerse en los asuntos internos de la U a instancias de 13 catedráticos traidores a los principios de la USAC.

Durante 54 días los universitarios mantuvieron tomadas las instalaciones del Campus Central, a lo que se sumó la toma del Centro Universitario Metropolitano y varios Centros Regionales. Uno de los resultados más importantes de estas jornadas de lucha fue el resurgir del movimiento estudiantil universitario, en la forma de una amplia vanguardia que incluye a los grupos que conforman EPA y otros sectores estudiantiles que apoyaron la lucha de EPA y se organizaron por su propia iniciativa.

De primera importancia ha sido también el apoyo popular que generó la lucha, que se concretó en la formación de una coordinadora de organizaciones sindicales, campesinas, de docentes, de jóvenes, de mujeres, de empleados públicos y muchas más. Estos acontecimientos recientes marcan una nueva etapa en las luchas populares, que en adelante cuentan con el apoyo de un movimiento estudiantil universitario fortalecido y en crecimiento.

Este 20 de octubre hacemos un llamado a la unidad de las organizaciones campesinas, sindicales, indígenas, estudiantiles y populares para que juntos luchemos por las demandas más urgentes de los oprimidos: Defensa del territorio contra la minería y las hidroeléctricas; por un sistema de salud público eficiente y con suficiente presupuesto; por la nacionalización del servicio de energía eléctrica; por una educación pública gratuita y de calidad; por los derechos estudiantiles y una reforma universitaria que democratice la USAC; por una reforma agraria integral; por un aumento general de salarios.

PARTIDO SOCIALISTA CENTROAMERICANO (PSOCA)

Octubre 2010

www.elsoca.org

La Revolución de Octubre de 1,944 es el resultado de múltiples alianzas entre el Movimiento Universitario, Campesino y Sindical, que junto a grupos de poder económico y disidentes del ejercito lograron ponerle fin a la dictadura del Gral. Jorge Ubico, dando paso a un proceso revolucionario que durante 10 años generó  cambios perfilados a democratizar el Estado guatemalteco, sentando las bases de cambios estructurales que le pondrían fin a la desigualdad socioeconómica a la que los Pueblos hemos sido sometidos durante siglos…

Durante el Gobierno de Juan José Arévalo Bermejo el Estado guatemalteco constitucionalmente le otorgó a la Universidad de San Carlos de Guatemala su carácter Autónomo regido por su Ley Orgánica, garantizado internamente en el Gobierno del Poder Tripartito (estudiantes, docentes y profesionales) y la asignación de no menos del 5% del presupuesto de ingresos ordinarios del Estado.

La intervención del imperialismo norteamericano fue crucial para interrumpir en 1,954 junto a fuerzas de la extrema derecha oligárquica el rumbo revolucionario que el gobierno de Jacobo Arbenz orientaba para Guatemala. Hoy por hoy, la ideología Neoliberal emanada desde las elites mundiales de poder político y económico contemplan una serie de planes que pretenden refuncionalizar el Modelo de Acumulación.

La USAC no se escapa de este proceso globalizante, ya que en materia educativa la forma actual del capitalismo necesita que los centros de educación superior se consoliden para la oferta de técnicos profesionales que engrosen los engranajes del Modelo de Acumulación, convirtiendo el conocimiento en una mercancía de interés privado, y no en un conocimiento orientado a plantear alternativas científicas de carácter Popular que aporten a la solución de la problemática nacional, tal y como lo mandatan los principios rectores de la USAC.

La firma de los acuerdos entre EPA y el CSU es el resultado de la correlación de fuerzas que se articuló durante la coyuntura de los 54 días de toma de las instalaciones universitarias, de la criminalización y las medidas coactivas a las que fuimos sometidos como sector estudiantil. Reconocemos nuestra falta de lectura política del momento histórico que atravesamos, y las dimensiones de este…

Sin embargo logramos junto a  la Coordinadora de organizaciones sociales y populares en Defensa de la Educación Publica, Autónoma y Popular colocar la problemática universitaria a nivel nacional y cuestionar las estructuras de poder internas  (AEU, CSU) que trabajan en complacencia con los intereses de grupos políticos y económicos ajenos al espíritu revolucionario san carlista, que vulneran los logros históricos de la revolución del ‘44. Así mismo, fuimos reconocidos como movimiento estudiantil ante la mesa de trabajo para la restitución de los derechos estudiantiles y la mesa metodológica del Congreso de Reforma Universitaria.

Estamos conscientes de la falta de representatividad en las mesas de trabajo y de los planes que el CSU pretende viabilizar con la Reforma mercantilista del Plan U-22, ante lo cual MANIFESTAMOS:

Estamos dispuestos a luchar por llevar la voz de los sectores históricamente excluidos y a exigir la democratización e inclusión de las Escuelas no Facultativas y los Centros Regionales en el proceso. Hoy más que nunca necesitamos que las Unidades de Acción coyuntural, den pasó a la coordinación conjunta con el movimiento popular de cara al Congreso de Reforma Universitaria, con el objetivo de transformar estructuralmente la USAC y perfilar el proceso de enseñanza-aprendizaje hacia formas de emancipación Popular.

UNIVERSIDAD PARA TODAS Y TODOS

POR UNA EDUCACION PUBLICA, AUTONOMA Y CIENTÍFICO-POPULAR

20 de octubre de 2010

Más artículos…

Hemeroteca

Archivo